El Estado comprará terrenos en la costa para frenar la urbanización

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, anunció ayer que la Administración comprará terrenos en el litoral mediterráneo y los archipiélagos a partir del próximo año para combatir la degradación de las costas y la urbanización excesiva de las mismas. Las adquisiciones tendrán carácter excepcional y siguen el ejemplo francés en la materia. Narbona, que presidió ayer la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente en Madrid, declaró a los periodistas que se trata de una iniciativa pionera en España y que incluirá compras de terrenos «adyacentes al dominio público para completar la capacidad de preservar el litoral». A este respecto, aludió a la experiencia de otros países con estos proyectos, como el caso de Francia, «que tiene un organismo que compra espacios para protegerlos». Narbona ofreció un pacto en esta materia a las comunidades autónomas, cuyos máximos responsables en Medio Ambiente se reunieron en la Conferencia sectorial, teniendo en cuenta que en muchos casos tienen la competencia en materia de urbanismo. Respecto al montante económico de este programa de compra de terrenos, Medio Ambiente lo está negociando actualmente con el Ministerio de Economía y Hacienda para introducir la partida que corresponda en los Presupuestos Generales de 2006. La ministra destacó que «buena parte del litoral mediterráneo y de los archipiélagos requiere alguna que otra actuación de este tipo para recuperar o preservar espacios muy valiosos desde el punto de vista ambiental». Estas adquisiciones tendrán en ocasiones como finalidad hacer accesible una playa a los ciudadanos o defender el valor ecológico de un paraje. Aunque no concretó más las zonas donde se realizarán las inversiones, incidió en que se podría actuar en terrenos sometidos a servidumbre de protección, donde hayan podido cometerse irregularidades. Se trata de terrenos que «van más allá de la zona que queda deslindada como dominio público, donde hay actuaciones en las que debemos colaborar incluso con esa compra de terrenos, que es algo que nunca se había planteado ni hecho en España». Convenio con autonomías Narbona planteó a las autonomías una política de costas que suponga «un salto cualitativo» frente a la degradación del litoral, teniendo en cuenta que las comunidades son las competentes en materia de urbanismo, de ordenación del litoral, de gestión ambiental y de promoción de turismo.