En la calle

LAS COSAS que en la calle se encuentran, de quien las halla son. Hoy la calle del mundo es internet y a ella se tira de todo; o se dejan cosas como abandonadas, puro cebo o señuelo. Atropo una de ellas y aquí se brinda para meter algo de sonrisa en la tensión de estas canículas que producen modorr a y encabronamiento. Se titula el asunto «Veintitrés cosas que debes saber antes de morir». Relatando: El nombre completo del pato Donald es «Donald Fauntleroy Duck». En 1997 las líneas aéreas gringas ahorraron cuarenta mil dólares con sólo elimitar una aceituna de cada ensalada. Una jirafa se puede limpiar sus propias orejas con la lengua. Millones de árboles son plantados accidentalmente por las ardillas que entierran sus nueces y no recuerdan después dónde las escondieron. Comerse una manzana es más eficaz que tomarse un café para mantenerse despierto. Las hormigas se desperezan por la mañana cuando se despiertan. Los cepillos de dientes de color azul son más usados que los rojos. El órgano del hombre que puede crecer veinte veces su tamaño es... la pupila. Nadie es capaz de lamerse el propio codo... es imposible tocarlo con la lengua. Sólo hay un alimento que no se deteriora: la miel. Los delfines duermen con un ojo abierto (los banqueros, también). Un tercio de todo el helado vendido en el mundo es de vainilla. Las uñas de las manos crecen aproximadamente cuatro veces más que los pies. El ojo de un avestruz es mayor que su cerebro (toma, y el de algunos concejales). Los diestros viven, en promedio, nueve años más que los zurdos. El «cuac» de un pato no produce eco y nadie sabe por qué. El músculo más potente del cuerpo humano es... la lengua. Es imposible estornudar con los ojos abiertos. La jota es la única letra que no aparece en la tabla periódica. Una sola gota de aceite de motor hace que veinticinco litros de agua dejen de ser aptos para el consumo humano. Los chimpancés y los delfines son los únicos animales, junto con el hombre, capaces de reconocerse ante un espejo. Reir por el día hace que se duerma mejor por las noches. Aproximadamente el setenta por ciento (si no el cien por cien) de las personas que leen este mensaje... ¡¡intentaron lamerse el codo!!... Si sonreíste... tú eres uno de ellos. Que tengas un buen día.