Cosas de aquí y de allá | Acogida a la «francesa»
La hija vietnamita de Chirac
Anh Dao fue acogida hace 26 años por la familia del entonces alcalde de París
No se apellida Chirac pero llama papá al presidente de la República Francesa. Anh Dao Traxel llegó hace 26 años a Francia junto a varios centenares de refugiados vietnamitas y la suerte le deparó una excepcional familia de acogida: el entonces alcalde de París y su esposa Bernardette se la llevaron a vivir con ellos y sus dos hijas al ayuntamiento de la capital. Después de muchos años de silencio, se ha decidido a contar su vida en un libro que aparecerá a principios del año próximo. Tenía 18 cuando sus padres biológicos la metieron en un barco con destino incierto y el único objetivo de huir de la dictadura comunista que había decidido reeducarles. Cuando aterrizó en el aeropuerto Char-les de Gaulle después de siete meses en un campo de refu-giados estaba aterrorizada. No hablaba una palabra de francés y lloraba en silencio en un rincón cuando se le acercó un hombre y le dijo: «No llores más, cariño. A partir de ahora te vienes a nuestra casa». No entendió una sola palabra hasta que Bernadette se abrazó a ella y la acompañó en su llanto. Entonces comprendió que había encontrado un nuevo hogar. No la adoptaron porque no era huérfana. De hecho, su auténtica familia pudo instalarse en Francia 10 años después. Para ella, los dos años vividos con los Chirac fueron «un cuento de hadas» desde el momento en que un chófer llegó en coche oficial a recogerla en el centro de acogida donde había sido trasladada. Luego, en el ayuntamiento, conoció a las que serían también sus hermanas: Laurence, la hija mayor del matrimonio trágicamente enferma de anorexia mental desde que sufrió una meningitis con 15 años, y Claude, que trabaja como jefe de gabinete de su padre. Anh Dao se deshace en ter-nura al contar como Jacques Chirac fue quien le preparó la mochila en su primer día de clases de francés, como besaba a sus tres hijas antes de dormir o como fue él quien eligió su anorak y su equipo de esquí cuando la llevaron a la montaña para que viera por primera vez la nieve. Hoy Anh Dao Traxel está casada en segundas nupcias con un policía francés y tiene tres hijos que llaman «abuelo Jacques» al presidente. Sus nombres dejan constancia de su agradecimiento al matrimo-nio Chirac: Bernard, Laurence y Jacques. Su primer marido lo encontró a los 21 años entre los refugiados de su país. El todavía alcalde se ocupó personalmente de celebrar el matrimonio. Descubierta en el 2002 Su historia no salió a la luz hasta la última campaña de las presidenciales, en el 2002, cuando se celebraba el año de China en Francia. Anh Dao fue descubierta por la prensa francesa cuando asistía a la recepción que el entonces candidato a la reelección ofreció a los representantes de la colonia asiática. Entonces la bautizaron como «la hija secreta de Jacques Chirac». Ella explica su largo silen-cio porque siempre quiso ser «discreta». Ahora se decide a romperlo para mostrar su «reconocimiento» a la familia Chirac. Y en el momento más bajo de popularidad de su padre de acogida, da por hecho que el presidente que perdió el referéndum no tiene la menor intención de tirar la toalla. Para dolor de cabeza de Nicolas Sarkozy y otros aspirantes a la presidencia, Anh Dao asegura que Jacques Chirac «no ha dicho su última palabra» y que no se lo imagina «cogiendo una caña de pescar y jubilándose».