«Los riesgos innecesarios en la carretera son un absurdo»

Pere Navarro sigue por segundo verano las incidencias de la circulación, desde su despacho de director general de Tráfico, no sin cierta preocupación en este puente de la Virgen de agosto, «en el que se mezclan la fiesta, la noche, el alcohol, el cansancio y las carreteras secundarias». Navarro recuerda que «los riesgos innecesarios son un absurdo» y que «pueden dar la traste con un proyecto personal de descanso». -¿Cómo ve desde su departamento la marcha del verano? El mes de julio fue razonablemente bien, con un ligero descenso respecto al año pasado. El gran reto es agosto, que en el 2004 fue excepcionalmente bueno, con lo cual hay que prestar una especial atención para consolidar la tendencia a la reducción de accidentes. A largo plazo, las campañas de control de la velocidad y de la alcoholemia tienen que confirmar y consolidar el cambio de tendencia. -¿Perciben que los nuevos radares fijos influyen en el comportamiento al volante? -Percibimos que se van reduciendo las velocidades y que empieza a llamar la atención cuando uno circula a velocidades excesivas por el carril de la izquierda. No ejemplarizante -La reforma de la Ley de Seguridad, en vigor desde esta semana, también influirá en un descenso de la siniestralidad. -La fecha de entrada en vigor no la hemos elegido nosotros. Que la no utilización del cinturón de seguridad o del casco, o que el uso del teléfono móvil al volante hayan pasado a ser infracciones graves responde a la demanda y la preocupación social por los accidentes de tráfico. Por otro lado había que incorporarlos al permiso por puntos, donde sólo las infracciones graves o muy graves pueden restar créditos. -Pese a la dureza de las sanciones, ¿no les desaniman sentencias como la del caso Farruquito? -La justicia tiene que ser rápida y ejemplarizante. En este caso tenemos la impresión que no ha sido así y debemos hace una reflexión de lo que está pasando. -Y ahora llega el largo fin de semana. -Estamos muy preocupados con el fin de semana y el 15 de agosto, fiesta de la Virgen, día en el que tienen lugar las fiestas mayores en muchos pueblos de España. La mezcla de fiesta, alcohol, cansancio, noche y carreteras secundarias es peligrosa. Por eso pedimos la máxima atención y prudencia, a la vez que al volante ni una sola gota de alcohol y el cinturón de seguridad en los asientos traseros, que se reduzca la velocidad porque las prisas matan y que se preste atención a los trayectos cortos. -¿El director general de Tráfico conduce en vacaciones? -Me gusta ir en barco, pero corro poco, como mucho va a 8 kilómetros por hora y es un curso de paciencia para adaptarse a las circunstancias porque puedes tardar 20 horas en según qué viaje. -¿Este consejo vale también para los atascos en carretera? -Sí. En verano hay un eslogan que dice que «lo importante es llegar». Detrás de las vacaciones hay un proyecto personal de descanso, de reencuentro con la familia y los amigos, con lo cual es absurdo correr y arriesgar y dar al traste todo este proyecto de vacaciones. Es una época que todos deberíamos aprovechar para conducir relajados y disfrutar del viaje, pero hemos perdido la capacidad de hacerlo. -¿Que debe hacerse para evitar los atascos de vuelta este lunes? -Hay que hacer un esfuerzo para planificar el viaje y evitar coincidir todos en el mismo día, hora y sentido. Probablemente el 15 es el peor día para emprender el regreso. Lo mejor es estar informado. No hay que olvidar que lo importante es volver. No hay prisas. Los riesgos innecesarios en la carretera son un absurdo.