La Jornada Mundial de la Juventud espera a medio millón de jóvenes
Si de algo saben en Alemania es de logística, y ha llegado el momento de ponerla a prueba. De cumplirse los pronósticos, la Jornada Mundial de la Juventud, atraerá a casi medio millón de jóvenes hasta Colonia. Esta ciudad a orillas del Rin, corazón del carnaval, sabe lo que son eventos multitudinarios, pero la visita del Papa y el festival cristiano son palabras mayores. El primer pontífice alemán realiza su primera visita al extranjero, para bañarse con las masas, que en este caso son casi medio millón de jóvenes venidos de todos los rincones del planeta (casi 200 países). Más de 6.000 periodistas valorarán la impresión que el pontífice Joseph Ratzinger deje el domingo, cuando oficie misa en la explanada de Marienfeld, en las afueras de Colonia. Porque el nuevo Papa no quiere parapetarse detrás de cristales blindados y buscará el contacto con la gente. Para ello ya hay 4.000 policías en activo, a los que se sumarán otros tantos bomberos, además de la policía germana de lo criminal. Habrá aviones AWAC de la OTAN vigilando el espacio aéreo y todo lo necesario para responder al nivel de seguridad uno. Eso será a partir del jueves, momento en que los jóvenes podrán ver al Papa en vivo y en directo. Veinticinco mil voluntarios trabajan día y noche para organizar los actos que ya tienen lugar en Colonia, Bonn y Dusseldorf.