Otra vía para los discapacitados
Un revolucionario invento de dos universitarios argentinos mejora las prestaciones que la silla de ruedas da a los minusválidos, ya que facilita el desplazamiento de pie
Querían diseñar un taxi en el que pudiera entrar una silla de ruedas y hallaron la forma de mejorar la calidad de vida de aquellos discapacitados que deben depender de una silla para desplazarse. Esto fue lo que les ocurrió a dos jóvenes argentinos estudiantes de Diseño Industrial de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Córdoba. Fernando Hillman y Günther Pielman son los creadores de EVO 5, el nuevo invento argentino que ha despertado el interés de la comunidad ortopédica internacional. Durante dos años los investigadores trabajaron consultando a psicólogos, ingenieros y kinesiólogos para poder precisar cuáles eran las necesidades de las personas que deben desplazarse en sillas de ruedas. «Alquilamos una silla y empezamos a movernos en ella, para poder experimentar nosotros mismos cómo es el mundo de los discapacitados», cuenta Hillman. Así nació el EVO 5, quinto prototipo de un invento que deja obsoletas definitivamente a las sillas de ruedas tradicionales. La gran revolución de EVO 5 consiste en que el usuario puede estar de pie. El soporte está construido a partir de un asiento con estructura de aluminio, con mullidos de gel dérmico -que reduce la formación de escaras- apoyabrazos y enganches para las rodillas regulables y plegables. «Nos dimos cuenta que el problema con el que se enfrenta el discapacitado no está tanto en la ciudad en la que se mueve sino en el dispositivo con el que se mueve. El estar sentado lo limita mucho para actividades como cocinar, hacer trámites o cualquier cosa para la que se necesite estar erguido. Entonces partimos de esa premisa», explicó Hillman. Permanecer de pie El artilugio que han ideado también tiene un respaldo ergonómico de plástico rígido -también regulable- que se une a la plataforma a través de un brazo de palanca dotado de un motor paso a paso, que eleva a la persona. El diseño del soporte posibilita que el ocupante del asiento permanezca siempre perpendicular al suelo, en posición de parado, lo que mejora su estabilidad e interrelación con el medio circundante. La plataforma de desplazamiento, por su parte, está equipada con suspensión electrónica, motores alojados en las ruedas y orugas que copian el terreno. Está provisto de una computadora de procesamiento de datos, barras estabilizadoras y soportes para los pies, todo asentado sobre un piso de aluminio. A diferencia de otros equipos, el tamaño del EVO 5 es reducido, lo que permite un desplazamiento ágil en espacios pequeños. Asimismo, es capaz de sortear obstáculos en altura (pequeños escalones), gracias a un sistema de palancas que permite elevar la plataforma. Los artífices del invento consideran que el sustituto de la silla de ruedas puede utilizarse tanto en viviendas como en el exterior. Con el fin de aumentar sus prestaciones, los diseñadores crearon un control remoto para dirigir el vehículo, programar sus movimientos y regular las alturas del soporte. De esta manera, una persona con fuerza suficiente en los brazos puede (desde su cama, por ejemplo) levantar su tronco y ubicarse sobre la silla. A partir de allí, el aparato se encarga de generar la posición erguida. El EVO 5 podrá comercializarse a unos 7.500 euros si se produce en Alemania como pretende la empresa de ortopedia Otto Bock que ya tuvo contacto con Hillman y Pielman y mostró su interés en adquirir la patente de EVO 5 para su fabricación a gran escala. Si se produjera en Argentina su costo sería de 3.700 euros, pero los jóvenes universitarios no consiguieron apoyo de las autoridades.