Cerrar
Publicado por
CONSUELO SÁNCHEZ-VICENTE
León

Creado:

Actualizado:

LOS ESPAÑOLES no podemos llamarnos a engaño con la sequía porque forma parte de nuestro paisaje. En España este fenómeno meteorológico tiene carácter cíclico. A los años de abundancia de lluvia siempre le siguen otros años en los que apenas llueve. Pero, contra lo que se suele pensar, no es la falta de lluvia sino la mala gestión del agua disponible lo que convierte la sequía en un «pertinaz problema». Tal como advierten los expertos, gestionar bien el agua no es hacer pantanos ni dejar de hacerlos, hacer trasvases ni dejar de hacerlos, construir desaladoras ni dejar de construirlas. Para gestionar bien el agua o cualquier otro recurso natural, es imprescindible apostar por un modelo de desarrollo sostenible. En el caso concreto del agua, por no dejar que la especulación urbanística, turística o agrícola, que de todo hay, se impongan a la realidad de que en nuestro país las nubes descargan donde descargan, y aunque los ríos son de todos, están donde están, pasan por donde pasan, desembocan donde desembocan, y unos años tienen agua para dar, y otros no. Pero, a corto plazo, que a juzgar por lo que estamos viendo es el único plazo que parece interesar a nuestros gobernantes, enfrentar demagógicamente a la gente por el agua da más votos que afrontar la realidad El desarrollo sostenible no es una monserga de ecologistas de salón sino la única solución posible al problema del agua. Aunque Zapatero no se hubiera cargado el Plan Hidrológico de Aznar nada más llegar al poder (cosa que considero una insensatez, no en sí misma, sino porque lo ha derogado sin aportar alternativa creíble alguna), de poco sirven los pantanos si no llueve. Y exactamente lo mismo cabe decir sobre los trasvases. En un año que, como este 2005, lleva camino de ser el más seco del último siglo, los nuevos embalses y pantanos que preveía construir ese Plan estarían tan vacíos como los que se construyeron durante el franquismo. Y, de haberse llevado a efecto, el trasvase del Ebro correría la misma suerte que estamos viendo correr a su hermano mayor el trasvase del Tajo. Los años en que no llueve lo suficiente, ningún río puede donar agua a otro. Y, según los expertos, 2005 es el primer año de un nuevo ciclo seco. Por la misma razón que los incendios forestales hay que apagarlos en invierno, la sequía hay que prevenirla cuando llueve.