Vuelta al globo en un billete

La primera vez que se localizó el billete Yxxxx9869xxx, se encontraba en Holanda. Desde allí, alguien lo trasladó miles de kilómetros hasta una paradisíaca isla del Mar de Tasmania, en Nueva Zelanda. Cayó en manos de un tercero que lo trasladó hasta Cuba y así hasta que llegó a Cabo Verde, el último destino registrado. Es una forma un tanto absurda de entretenerse, pero ya son más de 70.400 las personas que siguen a través de Internet billetes de euro que previamente han registrado en la web www.eurobilltracker.com, muchos de ellos desde León. Se trata de una organización voluntaria sin ánimo de lucro dedicada a seguir los billetes. Cada usuario introduce los números de serie y su localización. De esta información la web extracta, por un lador, la información de difusión. Cada país de la zona euro tiene su propio rango de números de serie. De esa información se pueden generar gráficos que nos dicen cómo viajan los billetes a otros países. También se extracta información de tracking . Es decir, cuando un billete es reintroducido, los usuarios que previamente lo han registrado reciben un e-mail. Alemania lo mueve Además se están realizando una serie de estadísticas, caso de la que registra quiénes son los que introducen el billete, cuáles son los países más dinámicos y dónde está en tiempo actual cada euro. De la fusión de datos sumados desde que se puso en marcha este entretenimiento, en el año 2003, se deduce que son los alemanes los que más euros mueven por el mundo. El 30% de los registros proceden de este país, seguidos de Holanda (13,2%), Francia (10,6%), Bélgica (7,6%) y Portugal (7,6%). España apenas supera el 6%. Actualmente hay en la web 11,4 millones de unidades de billetes introducidos, por valor de 251,4 millones de euros, en casi 32.000 localizaciones diferentes. La página no está afiliada a la Unión Europea ni al Banco Central Europeo, ni tampoco a bancos o entidades financieras. Fue creada inicialmente por el webmaster Philiphe Girolami -de nick, giro-, aunque la traducción de la página y otras tareas están gestionadas por un grupo de miembros de Eurobilltracker. En estos momentos, la popularidad de la web se ha introducido en países como Polonia, Rumanía y Checoslovaca, por lo que se están reclamando traductores voluntarios que conozcan estos idiomas. Para prevenir fraudes Hay un enlace al formulario avanzado de entrada en la página de nuevo billete que permite introducir 25 billetes en un sólo proceso. No obstante, este acceso está restringido a los usuarios que han introducido más de 50 billetes, para previnir posibles fraudes. Participar en esta especie de juego suplanta las marcas o dibujos que muchos hacen en los billetes para que se conozca por manos de quién ha pasado. Aunque no es ilegal, tal y como constata el Banco Central Europeo, si se marca debería hacerse a un lado del billete, en la zona del fondo blanco. De esta manera no hay necesidad de desfigurar los billetes, que muchos bancos retiran precisamente por llevar marcas, por lo que lo único que se consigue es acortar el periodo de circulación. La primera letra de la serie identifica el país de origen y la primera del código corto, la imprenta que lo fabricó.