Los agricultores, que carecen de seguros contra huracanes, han perdido toda la cosecha
La tormenta «Delta» deja siete muertos y un rastro de destrucción
El vendaval deja a 200.000 personas sin luz e importantes daños en árboles y mobiliario urbano Como una z
Siete muertos, doce desaparecidos y tres heridos es el balance provisional tras el paso de la tormenta tropical Delta por las Islas Canarias. Los vientos, que llegaron a rachas de 200 kilómetros por hora en el observatorio de Izaña, dejaron a 190.000 personas sin suministro eléctrico, arrancaron árboles milenarios, destrozaron mobiliario urbano y edificios. Al vecino de Fuerteventura, de 63 años, que falleció el lunes al caer desde un tejado y a los seis inmigrantes muertos al hundirse una patera por el fuerte oleaje podrían sumarse los otros doce subsaharianos desaparecidos, que viajaban en la misma embarcación a unas 240 millas al sur de Gran Canaria. El buque de Salvamento Marítimo Esperanza del mar consiguió rescatar a 32 de los inmigrantes, pero durante la jornada ni los buques ni los helicópteros avistaron náufrago alguno. Los supervivientes está previsto que lleguen este miércoles a Las Palmas. Sólo en el campo los primeros cálculos apuntan a la pérdida de la mayoría de la cosecha de este año y el 70% de la del próximo. Esto se agrava en un territorio donde no hay costumbre de asegurar las cosechas contra los vientos huracanados. Evitar saqueos A esas pérdidas se sumarán las causadas por el apagón provocado al caer 13 torretas de alta tensión en el este de la isla de Tenerife. Unelco, empresa que distribuye el suministro en las islas, ha solicitado a la Península el envío de especialistas para reparar los tendidos. La Delegación del Gobierno en Canarias envió a 200 agentes a Santa Cruz de Tenerife para patrullar las calles de Santa Cruz y La Laguna, donde unos 190.000 abonados carecen de suministro. Las fuerzas de seguridad detuvieron a once personas sorprendidas cuando destrozaban escaparates o robaban en coches y comercios. Según el consejero de Presidencia, José Miguel Ruano, la prioridad del ejecutivo autonómico y de la Delegación del Gobierno es «mantener la seguridad por la noche en caso de que no haya servicio eléctrico».