Acuerdos con particulares

Fernández Carriedo explicó que se ha logrado la participación e integración social de los titulares de las fincas donde habita el águila imperial, que se ha plasmado con la firma del primer acuerdo de gestión con un particular para conseguir la plena integración de la especie. En este sentido, el consejero suscribió un convenio con Germán Escrivá de Romaní, propietario de una finca situada en Segovia, que supone la inversión por parte de la Consejería de 30.000 euros en tres años destinados a desbroces, instalaciones de viveros de conejos y mejora de la masa de robledal existente. El propietario, por su parte, se compromete a no desarrollar determinadas actividades que puedan dificultar el nacimiento y la cría de los ejemplares de águila imperial, en este sentido, se suprimirá el tránsito o no se realizarán cortas de árboles. El consejero aprovechó la ocasión para reconocer la labor individual y desinteresada que realizan determinados particulares para facilitar la conservación y mejora de esta emblemática especie. La Consejería distinguió en esta ocasión a Felipe Navarro y María Regina de la Mora, a los que se entregó un diploma acreditativo acompañado de una acuarela de un águila imperial ibérica y de una colección de libros.