El Director de Diario de León, Fernando Aller, dio la bienvenida al actor en el Hostal de San Marcos, donde tuvo lugar una pequeña recepción antes del estreno.
Viggo charla con su gran amigo, el periodista de esta casa Miguel Ángel Nepomuceno, quien ha hecho posible que el estreno de la película española del año tuviera lugar en León.
Antes del estreno, los actores y el director de la película tomaron algo relajadamente en el Hostal de San Marcos.
Allí tuvieron un primer contacto con sus fans leoneses a los que atendieron gustosamente, firmando autógrafos y dejándose fotografiar por ellos.
La joven actriz Elena Anaya, que en la película encarna a Angélica de Alquézar, atiende a uno de sus admiradores.
Y mientras, en las inmediaciones del teatro Emperador -en el centro de la ciudad- cientos de personas se congregaban para poder ver la entrada de los actores en el cine donde iba a tener lugar el estreno.
Los afortunados que obtuvieron invitación para asistir al estreno tuvieron que entrar al teatro por un pasillo abierto por la policía local, dada la multitud de gente que se agolpaba frente al teatro.
Como en todo estreno que se precie. Un grupo de fans japoneses, cámara en mano, se colocaron en primera fila para poder ver de cerca y retratar al actor del momento.
El director del Diario de León, Fernando Aller, el vicepresidente, Sergio Cancelo y el subdirector, Rafael Blanco, a la entrada del teatro.
Momentos más tarde, un coche cubierto con la bandera de León hacía su aparición. Dentro, el invitado más esperado, Viggo Mortensen.
Nada más bajar del coche una nube de periodistas se avalancharon sobre el actor, que pacientemente respondió a sus preguntas.
Con un ramo de rosas en la mano, que le entregó uno de sus fans, saludó a las cientos de personas que llevaban horas esperando por él en la calle.
El actor tuvo bastantes dificultades para acceder al Emperador, dada la multitud de personas que allí se agolpaban. Las fuerzas de seguridad consiguieron dominar la situación.
La impresionante bienvenida brindada por los leoneses a los protagonistas de la película, en concreto a Viggo Mortensen, logró emocionar al actor, que no tuvo más que palabras de agradecimiento para el público.
Una vez dentro, sesión de fotos.
Ya en el interior del teatro, los invitados ocuparon sus asientos para dar comienzo a la proyección.
Pero antes del inicio de la película, el actor tuvo unas palabras para su público, al que agradeció tantas muestras de cariño hacia su persona.
El público enloqueció con las palabras del actor, quién agadeció la reciente concesión de hijo adoptivo por parte del Ayuntamiento de León, al que -sin embrago- recriminó su falta de apoyo al teatro Emperador, ante su inminente desaparición.
Después de la película, director y actores se asomaron por uno de los palcos para recibir los aplausos del público, entusiasmado por el trabajo presentado.
Viggo Mortensen se mostró así de cariñoso con Díaz Yanes.
Y también con su compañera de reparto Elena Anaya.