Taiwán produce cerdos fluorescentes para destinarlos a la investigación
La Universidad Nacional de Taiwán ha anunciado la exitosa producción de cerdos con genes de proteína verde fluorescente, con aplicaciones en la investigación médica para la regeneración de órganos e ingeniería de tejidos. Los órganos coloreados de los cerdos permitirán a los investigadores una más fácil identificación y extracción de tejidos y genes destinados a trasplantes con aplicación en seres humanos, manifestaron los autores de la investigación. El equipo investigador extrajo los genes verdes fluorescentes de medusas y los inyectaron en fetos de cerdos para desarrollar genes con el transgénico de la proteína verde fluorescente. La investigación en este campo está muy avanzada y los cerdos transgénicos pueden facilitarla, señaló el director del proyecto, Wu Shinn-chih, profesor del Departamento de Zoología y Tecnología, que agregó que «existen muchas esperanzas en la regeneración de tejidos y órganos humanos utilizando cerdos». La evolución de la ciencia curativa avanza hacia la medicina biológica, en la que se utilizarán células, tejidos y glándulas extraídos de órganos embrionarios donantes para curar enfermedades, apuntó el científico. El Gobierno dio luz verde este viernes a una propuesta del ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, para equiparar en derechos y deberes constitucionales al millón y medio de españoles que viven fuera del país con los que residen en territorio nacional. El futuro Estatuto de los Ciudadanos Españoles en el Exterior facilitará, entre otras cosas, que todos los españoles emigrantes puedan ejercer el derecho al voto, el disfrute de ventajas sociales y de prestaciones por desempleo. El proyecto de ley, que tiene ya el visto bueno de Consejo Económico y Social, salvaguarda como «derechos y deberes» de los españoles en el exterior la posibilidad de elegir y ser elegido en unas elecciones, el acceso a la salud y la educación, el cobro de subsidios de paro y el acceso a la cultura española. Responde, explicó el Gobierno, a las «reiteradas demandas» realizadas por las organizaciones de emigrantes que encuentran numerosos obstáculos a la hora de ejercer esas facultades. Estas prestaciones sociales beneficiarán, sobre todo, los colectivos más débiles y desfavorecidos, como los mayores, los discapacitados, los jóvenes sin recursos o las mujeres con especiales dificultades de integración social o laboral. En muchos casos, la situación de esas personas es grave por vivir en países en los que las ayudas públicas son escasas o incluso inexistentes. Por razón de necesidad Se introduce la «prestación por razón de necesidad», que engloba la pensión asistencial por ancianidad y la asistencia sanitaria. Para garantizar el derecho al sufragio, el proyecto obligará a la Administración a mantener el censo electoral en «permanente actualización» y a facilitar el voto mediante la instalación de urnas en todos los lugares donde las condiciones lo permitan. La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, explicó que el Gobierno ha realizado un importante esfuerzo para «limitar el desarraigo» y «saldar una deuda histórica» con cuantos salieron del país por motivos políticos o económicos tras la guerra civil o durante el franquismo. Trabajo destinará 276 millones de euros a aplicar el proyecto.