Cerrar

Los cabecillas de la red actuaban desde Rumanía y hasta el momento han escapado | Análisis | Grupo en expansión |

La policía detiene a 297 rumanos en el?mayor?golpe?a?las?mafias?en España Reyes de la estafa, los robos y la prostitución

Más de 500 agentes tomaron parte en la operación contra la delincuencia en once ciudades Los rumanos controlan el 70% del negocio d

Publicado por
Alejandro Posilio Javier Arraiza - redacción | madrid redacción
León

Creado:

Actualizado:

La policía ha llevado a cabo el mayor golpe dado en España a una red mafiosa internacional que ejecutaba todo tipo de fechorías, con especial dedicación a los robos con fuerza en los domicilios y a la falsificación y uso fraudulento de tarjetas de crédito. La operación, denominada Braila, se ha saldado con la detención de 297 ciudadanos rumanos, cuyos cabecillas actuaban desde su país. Más de 500 agentes han toma-do parte en esta operación «sin precedentes», según la calificó ayer el ministro del Interior, José Antonio Alonso, quien manifestó: «Es la mayor operación policial realizada hasta la fecha contra una organización de delincuentes extranjeros desarrollada conjuntamente por dos países europeos». Los agentes han actuado en once provincias (Valencia, Almería, Barcelona, Sevilla, Zaragoza, Castellón, Palma de Mallorca, Madrid, Santander, Málaga y Toledo) de ocho comunidades autónomas diferentes y han detenido a 283 delincuentes en España y 14 en Rumanía. Numerosos delitos A los detenidos se les acusa de delitos de robo con fuerza en domicilios, fraude con medios de pago, tráfico de estupefacientes, falsificación de documentos, delitos relativos a la prostitución, contra los derechos de los trabajadores y asociación ilícita. Los cabecillas de la banda re-sidían en su país y desde la dis-tancia dirigían las actuaciones. De momento han logrado escapar, pero la policía ha solicitado ayuda a Interpol y a Europol para su captura. Sin embargo, el que sí ha sido arrestado es el cerebro en España, Iorgu I., alias Talanu, que contaba con varios lugartenientes, que también han sido detenidos, que controlaban todas las actividades delictivas. Es más, alguno de los integrantes y responsables de la organización se encontraban cumpliendo condena en prisiones españolas, desde donde coordinaban determinadas ilegalidades. Las investigaciones comenzaron en septiembre del 2005, a raíz de las informaciones facilitadas por la embajada de Rumanía en España sobre un grupo de delincuentes que se dedicaban al robo de camiones de gran tonelaje para el transporte internacional. Pero los agentes descubrieron que esta actividad era una de las múltiples ilícitas a las que se dedicaban. También averiguaron que integraban una organización criminal de carácter mafioso, con ramificaciones en otros países de Europa. A pesar de todo, la banda se había especializado en los robos con fuerza en domicilios y en la falsificación de tarjetas de crédito, lo que les permitía realizar fraudulentamente compras de artículos en diferentes establecimientos de España o la extracción de dinero en efectivo en cajeros automáticos de oficinas bancarias. Desde el 2003, el de los rumanos es el grupo de delincuentes extranjeros más numeroso que opera en España. Según los datos que maneja la policía, controlan el 70% del negocio de la prostitución de todo el país, tanto en locales como en la calle. Un negocio que, por cierto, mueve más de 18.000 millones de euros al año. Y lo han conseguido practican-do una violencia pocas veces vista antes por las fuerzas de seguridad. Sin embargo, desde hace algún tiempo, las mafias rumanas están combinando esa tendencia a la violencia brutal con un creciente grado de organización y jerarquización. Muchas de la mujeres con las que trafican y a las que explotan sexualmente llegan a España con los papeles en regla. En los últimos tiempos han aumentado su mercado y colaboran con otros grupos como los albanokosovares para que les provean de mujeres. Muchas de las mujeres de esta procedencia que trabajan en los burdelesestán bajo control rumano. Fraudes millonarios Sus otras especialidades son el fraude con tarjetas de crédito y los robos nocturnos en viviendas. Para los primeros se sirven de todo tipo de tretas, desde la clonación de las tarjetas hasta la actuación en connivencia con algún empleado de comercio. Les basta un ordenador portátil y un buen informático, un sector que en Rumanía alcanza un paro muy alto. Visa y Mastercard cifran en 100 millones de euros el coste anual de este fraude. Con todas estas actividades, los rumanos han ascendido al primer lugar entre los grupos de delincuencia organizada en España. Y eso no es poco, tratándose de un negocio sumergido.

Cargando contenidos...