Y el año que viene, en León

León será el año que viene la sede del Congreso y Exposición Internacional de Protección Civil y Transporte Aéreo-Terrestre de Emergencias (Protec), cuya primera edición se clausuró ayer en Valladolid. Así lo anunció el consejero de Presidencia y Administración Territorial, Alfonso Fernández Mañueco, quien también avanzó que la edición del próximo año 2008 se celebrará en Perú. El acto de clausura de este encuentro, que ha durado tres días, ha congregado a más de 700 personas y en el que han participado expertos de todos los ámbitos de la seguridad y la protección civil, se celebró en la Base Aérea de Villanubla (Valladolid), donde se realizó una exhibición aérea y un simulacro de accidente que contó con la participación de la Junta, la Administración del Estado a través del Ejército del Aire y las administraciones locales con la presencia de policías y bomberos. Durante esta semana, los expertos que han participado en el Congreso incidieron principalmente en la necesaria coordinación entre las administraciones públicas. En Castilla y León hay más de 10.000 personas trabajando en la seguridad de los ciudadanos, lo que permitió al consejero de Presidencia afirmar que la comunidad «cuenta con los medios materiales y humanos necesarios para atender situaciones catastróficas». En esta misma línea, el consejero de Sanidad, César Antón, insistió en que Castilla y León está preparada para afrontar situaciones de emergencia ya que cuenta con suficientes helicópteros, unidades móviles de emergencia, y las unidades de soporte vital básico. Exhibición aérea La Base Aérea de Villanubla congregó a cerca de 1.000 personas, la mayoría participantes en Protec, que asistieron a una exhibición de la Patrulla del Ejército del Aire ASPA, integrada por cinco helicópteros Colibrí pilotados por instructores de Base Aérea de Armilla (Granada), que durante más de media hora realizaron algunas de las maniobras más complicadas, llegando a alcanzar su velocidad máxima en alguna de ellas, que se sitúa en los 220 kilómetros por hora. Posteriormente, tuvo lugar el simulacro de accidente aéreo, organizado por la Agencia de Protección Civil e Interior de la Junta, que dirige Luís Aznar, con la colaboración de la Delegación del Gobierno en Castilla y León. Cerca de un centenar de personas participaron en el simulacro, que consistió en un supuesto incendio en un motor y un problema eléctrico.