Salgado presenta un plan para mejorar la calidad y seguridad de la Sanidad

La mejora continuada de la calidad y la seguridad de los pacientes constituye, sin duda, el principal desafío al que se enfrenta el sistema sanitario. Los responsables del Ministerio de Sanidad han impulsado un ambicioso Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud que persigue consolidar una atención sanitaria «de excelencia», más personalizada y centrada en las necesidades particulares de los pacientes. La titular del departamento, Elena Salgado, precisó que los ejes de actuación de este plan pretenden no sólo una evidente mejora de los servicios en la atención sanitaria, sino potenciar la cohesión del sistema, de manera que se garantice la máxima calidad a todos los ciudadanos en condiciones de igualdad en todo el territorio nacional y «con independencia de su lugar de residencia». Compromiso del Gobierno El plan fue un compromiso adquirido por el presidente del Gobierno durante su discurso de investidura y ratificado posteriormente en la II Conferencia de Presidentes, celebrada en septiembre del 2005. Con una financiación de 65 millones de euros (50 de ellos ya presupuestados este año), el proyecto «se dirige fundamentalmente a los ciudadanos», si bien dedica una atención especial a los profesionales sanitarios, a quienes se dirigen buena parte de las acciones destinadas a fomentar la excelencia clínica y la adopción de buenas prácticas basadas en la evidencia científica. Estructurado en seis grandes áreas (protección, promoción de la salud y prevención; fomento de la equidad; recursos humanos; excelencia clínica; uso de las nuevas tecnologías, y aumento de la transparencia del sistema) que incluyen unos 200 proyectos, la ejecución del plan implicará una «alianza activa en pro de la mejora continuada de la calidad». Uno de los aspectos más destacados y novedosos del plan versa sobre la mejora de la seguridad de los pacientes en los centros hospitalarios. Se incluyen acciones para aumentar la «cultura de seguridad» entre los profesionales sanitarios y la publicación en breve del primer Estudio Nacional de Efectos Adversos (Eneas). Sanidad impulsará proyectos para reducir los «efectos no deseados» que se producen en ocasiones en la atención sanitaria. Se persigue minimizar los efectos adversos que sufren los pacientes hospitalizados por complicaciones derivadas de la anestesia y la cirugía, de las infecciones o de los errores debidos a una incorrecta administración de medicamentos, entre otros.