La Junta licita trabajos silvícolas en 60 municipios para prevenir los incendios

Las actuaciones silvícolas que se llevan a cabo en las masas arboladas de Castilla y León tienen como objetivo incrementar la calidad de la producción de los recursos naturales (maderas, piñones, castañas, hongos), garantizar la conservación del hábitat y los recursos cinegéticos, fomentar la biodiversidad y contribuir a mejorar el paisaje. Además, la limpieza de los montes para eliminar el combustible acumulado ayuda a disminuir el riesgo de incendios y facilita la defensa frente a los mismos. La Consejería de Medio Ambiente ha sacado a licitación la contratación de trabajos silvícolas preventivos de incendios forestales en 3.625 hectáreas, que afectarán a más de 60 municipios de 23 comarcas pertenecientes a 8 provincias de Castilla y León. Las actuaciones supondrán una inversión superior a 6,5 millones de euros y se desarrollarán con un plazo de ejecución de entre 3 y 31 meses. Entre las comarcas beneficiadas se encuentran la de Arenas de San Pedro (Ávila), con 717 hectáreas y 1,8 millones de euros de inversión, y las de Soncillo, Medina de Pomar y Pinares-Ribera (Burgos), con 1,83 hectáreas y 1,1 millones. En las comarcas de La Bañeza y Gradefes, se realizarán tratamientos silvícolas en 161 hectáreas, con una inversión de 222.000 euros. En Palencia, se tratarán 422 hectáreas y un coste de 500.000 euros en las comarcas de Páramos, Campos y Boedo-Ojeda. En la provincia de Segovia, se verán beneficiadas las de Bodeguillas, Riaza, Navas de Oro y Santa María la Real de Nieva, con 777 hectáreas y un presupuesto de 1.030.000 euros. En la de Soria se tratarán 246 hectáreas en la comarca de Almazán-Burgo-Bayubas, con un coste de 447.000 euros y, finalmente, en la de Zamora, las actuaciones afectarán a 217 hectáreas y supondrán 463.000 euros de inversión. Según se indica desde la citada Consejería, este tipo de labores preventivas se realiza a lo largo del año aunque la presencia de cuadrillas sea más visible durante el periodo estival. El trabajo que se desarrolla en estos meses permite una alta disponibilidad de personal preparado y conocedor del monte. Actuaciones Los tipos de tratamientos silvícolas que se desarrollan en Castilla y León son muy variados y, dependiendo de las necesidades, se pueden combinar en la zona de actuación. Los más significativos son los clareos y claras, consistentes en la reducción de la densidad del arbolado eliminando los no deseados para obtener espesuras acordes con su desarrollo y producir la puesta en luz de los pies adyacentes; la poda, es decir, la eliminación por corta de las ramas inferiores con el fin de conformar fustes y masas más adecuadas al objetivo de gestión establecido, y el desbroce, bien sea manual (azada, hacha) o mecánico (motodesbrozadora), que sirve para eliminar el matorral mediante operaciones de arranque, descuaje o roza. Todos los productos procedentes de clareos y podas, con diámetro superior a 6 centímetros, se limpian de ramillas, se trocean y apilan para su aprovechamiento como leña por parte de los vecinos. En prevención de un posible brote de plagas o enfermedades forestales, los residuos procedentes de trabajos silvícolas sin valor comercial se eliminan mediante trituración «in situ» utilizando una trituradora de cadenas o martillos acoplada al tractor forestal para, posteriormente, ser repartidos de forma homogénea dentro de la zona de actuación.