| Crónica | La degradación de la Gran Vía madrileña |
El centro de la marginación
El apuñalamiento el viernes de una joven ucraniana en pleno centro de Madrid refleja el grado de deterioro de esta zona, permanentemente denunciado por los vecinos
Prostitutas, drogadictos, camellos y mendigos. Éstas son las tribus que a cualquier hora del día y de la noche ocupan los alrededores de la Gran Vía madrileña, famosa por ser un intento de copia de la espectacular Broadway neoyorquina. Cualquier vecino, paseante, turista o policía que visite la plaza de Santa María Soledad, antes llamada Tudescos y popularmente conocida como el basurero del barrio de Universidad, puede comprobar como se ha convertido en un gueto tomado por las capas marginadas de la sociedad madrileña. El brutal apuñalamiento en la tarde del viernes de una joven ucraniana asidua de esta plaza (los vecinos aseguran que era prostituta, circunstancia no ratificada por la policía), no hace más que darle la razón a los vecinos, que un día tras otro, y el último fue el pasado miércoles, denuncian la degradación absoluta en la que han caído estas calles contiguas a Callao. El vídeo grabado por los vecinos y enviado a los medios de comunicación 48 horas antes del asesinato dibujaba el contexto en el que se desarrolla la vida en esta zona de la capital. Las imágenes de prostitutas buscando negocio, camellos vendiendo todo tipo de drogas, mendigos rodeados de sus bártulos y drogadictos consumiendo sin tregua reflejan con nitidez en qué se ha convertido el centro geográfico de España. Los vecinos, organizados en la Asamblea Ciudadana del Barrio de Universidad, llevan tiempo denunciando esta degradación, sin obtener respuesta adecuada por parte de ninguna de las tres administraciones. «Está peor que nunca. Parece que protegen más estas actividades ilícitas que a los ciudadanos honrados», asegura un miembro de la directiva de esta asociación. Estas denuncias parece que han servido de poco. Ni siquiera la presencia de una comisaría de la policía nacional, ubicada a 200 metros de la plaza Tudescos, ha servido para normalizar el ambiente en la espalda de la Gran Vía, una de las zonas más visitadas de la ciudad por la presencia de los principales cines y teatros de la capital. Datos estadísticos Pero este espacio cultural cada día lo es menos, pues la degradación que sufre está provocando la reducción de estos espacios dedicados al ocio. Un ejemplo claro son los cines Luna, ubicados en la misma plaza Santa María Soledad, cerrados porque los visitantes huyen de una plaza tomada por la marginación. Y no son los únicos casos de abandono. El quiosco de prensa y otros locales comerciales han cerrado sus puertas por la misma causa. Y ante esta situación, las autoridades echan mano de los datos estadísticos generalistas para acallar a los afectados. El mismo alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró el día del asesinato de la joven ucraniana: «La capital es mucho más segura ahora que hace tres años». Y lo ratifica con datos: «La delincuencia ha descendido en la ciudad de Madrid en más de un 2% en lo que va de año, lo que sumado a las cifras del 2004 y 2005, cuando se redujeron un 7% y 4%, respectivamente, hacen que la capital sea ahora mucho más segura».El último homicidio le ha servido a la Comunidad para exigir más policías al Gobierno y cargar contra Zapatero.