El metano es en Titán lo que el agua en la Tierra
Según la investigación de un equipo español, el metano tiene un ciclo de tormentas y lluvias que lo convertiría en el segundo lugar del sistema solar con depósitos líquidos en superficie
El metano cumple en Titán la misma función que el agua en la Tierra, es decir, tiene un ciclo de tormentas y lluvias que lo convertiría en el segundo lugar del sistema solar con depósitos líquidos en superficie, según la investigación de un equipo español que publica hoy la revista Nature . Los investigadores Ricardo Hueso y Agustín Sánchez Lavega han formulado un modelo que demostraría que son tormentas gigantescas y subsiguientes precipitaciones de metano las causantes de los cauces y estructuras fluviales de reciente formación detectadas por la misión Cassini-Huygens. Su «predicción» fue confirmada ayer por la ESA, que gestiona la Cassini-Huygens junto a la Nasa y la Agencia Espacial Italiana, ya que ha anunciado que la sonda Huygens, lanzada en enero del año pasado sobre la superficie del satélite, ha detectado en el polo norte de Titán depósitos líquidos de hidrocarburos, es decir, que son de metano o de etano. Lavega explicó que «lo importante» del trabajo que publican mañana en Nature es que demuestra que «de verdad» puede haber tormentas y llover en superficie, y que, aunque se trate de metano, ese ciclo no se produce en ningún otro lugar aparte de la Tierra. El metano se encuentra en la Tierra en forma de bolsas de gas subterráneas consecuencia de los procesos orgánicos, mientras que en Titán, el segundo satélite más grande de los conocidos, es natural y está a la temperatura del satélite, 180 grados bajo cero, un estado en el que se puede condensar y formar «gotitas líquidas». Esta «luna», de la mitad del tamaño del planeta Tierra, está a 1.500 millones de kilómetros del Sol.