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La hora del Comando Molleja

El Movimiento Leonés para la Liberación de los Enanos de Jardín elige una vivienda de Veguellina de Órbigo como primer objetivo de sus intervenciones, que tendrán periodicidad anual

León

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Había una vez una niña muy bonita, una pequeña princesa que tenía un cutis blanco como la nieve, labios y mejillas rojos como la sangre, y cabellos negros como el azabache. Su nombre era Blancanieves, y si los Hermanos Grimm hubieran sabido cuánta gente se iba a forrar a cuenta de su cuento, lo mismo no lo hubieran escrito, y Walt Disney hubiera tenido que dedicarse al manga japonés. 184 años después de todo aquello, resulta que Sabio, Gruñón, Mudito, Dormilón, Tímido, Mocoso y Bonachón tienen un club de fans un poco particular en León. Su primera irrupción en público, vía comunicado anónimo, ha tenido lugar este mes. El Movimiento Leonés para la Liberación de Enanos de Jardín (MO.L.L.E.JA) ha instruido a un comando en las tareas del estudio del impacto del arte y la estética en el entorno, y han elegido una vivienda de Veguellina de Órbigo para dejar allí instalada una pareja de enanos de jardín. «Nos mueve un doble sentido histórico-estético» dice su misiva. «En primer lugar, liberar cada año una pareja de enanos de jardín de sus yugos, de esas tristes vidas en las estanterías de algún comercio, expectantes y llenos de polvo. Y en segundo lugar, ofrecer a aquellas viviendas unifamiliares de León, que hayan desarrollado lo que consideramos un nivel estético suficiente, dentro de una armónica línea, la oportunidad de ser el hogar de acogida de una pareja de enanos de jardín liberados». Generosidad absoluta No hay objetivos económicos: «Actuamos con total generosidad, sin patrocinador alguno y corriendo con los gastos de nuestras intervenciones, unicamente movidos por el deseo de llevar al mayor número posible de personas la oportunidad de reflexionar sobre las emociones estéticas que cotidianamente embargan a los individuos y su impacto en el entorno». La nota finaliza advirtiendo que el comunicado «será el único que el Comando MO.L.L.E.JA enviará a lo largo del año 2006, ya que hasta el año próximo, no está prevista la liberación de otra pareja de enanos de jardín». «En cualquier caso» advierte «les mantendremos al corriente de todas nuestras intervenciones». La nota se firma «en algún lugar de León» fechada a finales de mes, y las reacciones han sido nulas. El Príncipe (el de Beuckelaer, no: el del cuento) se negó a contestar cualquier pregunta: «No vendo en la prensa mi vida privada». La madrastra está de vacaciones en las Islas Maldivas, y permanece ilocalizable.