Benedicto XVI pide a los alemanes que sean fieles al cristianismo

El papa Benedicto XVI rindió homenaje el sábado a su región natal, la muy católica Baviera, en la ceremonia de bienvenida organizada en el aeropuerto de Múnich, en el sur de Alemania, cuyo presidente, Horst Kohler, le instó a hacer progresar el ecumenismo. «Estoy aquí ante todo para expresar el vivo sentimiento de reconocimiento que siento hacia todos aquellos que han contribuido a formar mi personalidad», señaló el Sumo Pontífice, quien nació y creció en Baviera, donde además estudió y fue ordenado sacerdote en 1951. «En las horas decisivas de su Historia, el pueblo bávaro siempre ha confirmado (...) su firme apego a la fe católica», destacó el Santo Padre. «También estoy aquí (...) para reiterar y confirmar los vínculos profundos que existen entre» el Vaticano y la Iglesia alemana, agregó el Papa, insistiendo en que «estos vínculos tienen una historia secular». «Mi visita (...) aspira también a ser un aliento en este sentido: Baviera es un componente de Alemania. Al formar parte de la Historia de Alemania con sus altos y sus bajos, tiene buenas razones para estar orgullosa de las tradiciones heredadas del pasado», agregó. «Mi deseo es que todos mis compatriotas de Baviera y de Alemania entera desempeñen su papel en la transmisión de los valores fundamentales de la fe cristiana a los ciudadanos del mañana», afirmó. El Papa saludó asimismo a los fieles alemanes «de las comunidades eclesiásticas luterana y ortodoxa», a aquéllos de otras religiones y a todas las personas de buena voluntad que buscan la paz y la serenidad del país. Por su parte, en su alocución, el presidente Kohler, que es protestante, hizo un llamamiento muy personal. «Santo Padre, precisamente en Alemania, el país donde nació la Reforma, el deseo de muchos cristianos es (que se logre) la comprensión ecuménica, y -para decirlo de forma más directa- el progreso ecuménico», dijo. La canciller alemana, Angela Merkel, se comprometió ante el Papa a defender los fundamentos de la sociedad cristiana en Europa durante la próxima presidencia alemana de la Unión Europea, el primer semestre de 2007. Merkel, quien fue recibida en audiencia privada, considera que Europa precisa unos fundamentos religiosos y éticos comunes, explicaron fuentes gubernamentales, al término de ese encuentro. La jefa del Gobierno alemán, de religión evangélica e hija de un pastor protestante, incidió, además, en la necesidad de avanzar en el movimiento ecuménico y de estrechar los lazos con la Iglesia ortodoxa.