Al pan, pan, al vino... de León
El buen tiempo acompañó a la ya tradicional representación de la pisa de la uva, que esta edición nombró como bodegueros al periodista Pedro García Trapiello y al crítico Jesús Flores
Con el final de la época estival llega otra, la de la vendimia de la uva que tan arraigada tradición tiene en esta tierra leonesa. Un arraigo que no sólo se deja ver en la siembra o recolección de la misma, sino que también es objeto de una de las representaciones más emblemáticas y a la que cada año acude a contemplar un mayor número de aficionados y curiosos. Llegado el mediodía de ayer, cientos de leoneses se congregaron en el Corte Inglés para festejar por quinto año consecutivo la conocida como Fiesta de la Vendimia, que organiza este centro comercial y la bodega leonesa Vile. El acto, que este año contó con la presencia de distintas personalidades y que fue presentado por la periodista Beatriz Jarrín, nombró como bodegueros mayores al escritor y periodista de este rotativo Pedro García Trapiello y al director técnico del Aula Española de Sumilleres y crítico Jesús Flores, por la defensa y promoción de los caldos leoneses que desde hace años han hecho en diferentes puntos de la geografía española. «Ya los astures, que bebían cerveza, estaban obsesionados con el vino»; «Este caldo ha sido desde siempre parte esencial de León» o «La vendimia es una fiesta porque se recolecta el trabajo y la dedicación de todo un año» fueron algunas de las frases que Trapiello empleó en su intervención, en la que animó a todos los presentes a seguir trasmitiendo los valores de una dedicación «tan leonesa», al tiempo que reclamó leyes para proteger el patrimonio subterráneo de provincia, que «cuenta con unas 60.000 bodegas escavadas». Jesús Flores, que lleva más de 35 años en el mundo del vino, también destacó la importancia que tiene en esta tierra, y cuyo mejor aliado es la gastronomía. «quien sabe beber, sabe vivir», apuntó. La Fiesta de la Vendimia prosiguió con la llegada de un carro engalanado que portaba 400 kilos de uvas, según la organización, y que fue vertido en el lagar acondicionado para la ocasión para realizar la tradicional pisada por parte de los vendimiadores y autoridades, obteniendo como resultado el primer mosto que fue degustado por todos los asistentes, junto a otros aperitivos, al son de dulzainas y bailes regionales que interpretó la Escuela Municipal de Música. Muestra lograda Los actos se prolongaron a lo largo de toda la mañana con lo que, un año más, los leoneses revivieron de la forma más lograda, incluso con el chirrío de los carros, la tradicional pisa de la uva.