Los propietarios vuelven a limitar la modernización de regadíos del Porma La Fundación Carriegos imparte terapia ecuestre a nueve niños autistas Las parcelas que se excluyan de la renovación tendrán dificultades para recibir agua a partir del 2008

La Seiasa del Norte, el organismo que predica y gestiona la transformación de estructuras agrarias, tendrá que revisar el proyecto de modernización de regadíos que había diseñado para cinco mil hectáreas dependientes de la comunidad de la Margen Izquierda del Porma. En el año 2005, los dueños de las tierras decidieron renunciar a la modernización en cuatro mil hectáreas de esta zona. El proceso de renovación, que se aprobó en el 2005, y que añadía además la reconcentración con el fin de mejorar las posibilidades de competitividad de los agricultores, se ha frenado en parte por la postura de dos centenares de propietarios del municipio de Corbillos que se niegan a que se produzca reestructuración en sus parcelas. La superficie bloqueada suma una quinta parte del total previsto para la intervención, para la que ya están comprometida una inversión de más de treinta millones de euros. «No podemos llevar un proyecto independientemente del otro; los propietarios no quieren modernizar la estructura agraria y así no se puede iniciar la modernización de regadíos porque afectaría al sistema de automatismo que se va a implantar», explicó resignado Matías Llorente, presidente de la comunidad de regantes de la Margen Izquierda del Porma, que lamentó este contratiempo con los trámites administrativos finalizados. La renuncia al proceso de modernización ha obligado a los promotores de la iniciativa, la comunidad de regantes -los ayuntamientos y la administración del Estado- a disponer una alternativa para no peder la asignación económica dispuesta para transformar el regadío tradicional de esta zona. Cabreros del Río, Cubillos y Campo de Villavidel, que ocupan los sectores de III y IV de la comunidad de riego, recibirán la modernización. Y se les unirán unas 1.100 hectáreas pertenecientes al sector sexto dentro del municipio de Cubillas, y las parcelas del sector quinto. De esa forma se reestructurará al mapa inicial de modernización, del que también saldrá el terreno de Riego del Monte, perteneciente a Villanueva de las Manzanas, cuyo ayuntamiento no solicitó la agrupación de parcelas. La Fundación Carriegos ha comenzado a desarrollar un proyecto de terapia ecuestre destinado a los integrantes de la asociación Autismo León. Esta actividad cuenta con el patrocinio de la Obra Social de Caja Duero, gracias a la cual 9 niños con rasgos autistas recibirán terapia ecuestre durante 9 meses. Durante el tiempo que dure el proyecto, cada niño participará en 40 sesiones de este método terapéutico, que se basa en la utilización del caballo para incidir positivamente en el tratamiento y rehabilitación de discapacidades físicas y psíquicas. El equipo multidisciplinar de la Fundación Carriegos se centrará principalmente en el componente emocional y así poder consolidar el vínculo que se da entre el caballo y el paciente. Además, también se trabajará en la esquematización de la rutina del trabajo a través de un contexto lúdico y en el área de la sensopercepción y del lenguaje analógico y digital. Esta no es la primera experiencia de la Fundación Carriegos con pacientes con autismo, ya que en verano de 2005 organizó el primer campamento de terapia ecuestre para autistas que ha tenido lugar en España «el proyecto con Autismo León es muy importante para nosotros, ya que además de poder trabajar a largo plazo, nos permitirá aplicar la experiencia adquirida en los tres campamentos de autistas que hemos tenido y en el trabajo individual con pacientes externos», apunta el gerente de la Fundación, Álvaro de la Puente. Desde que comenzara su actividad en 2004, la Fundación Carriegos ha atendido a más de 450 discapacitados. El sistema de riego a la demanda -definición oficial de la modernización de regadíos de la que están pendientes más de treinta mil hectáreas en la provincia de leonesa- implica, además de mejora en el rendimiento de los cultivos, ahorro en el consumo de agua. El empeño de la Seiasa del Norte por impulsar estas iniciativas en los cultivos leoneses no resulta gratuito. En el año 2008 comenzará a aplicarse una de las nuevas normas sobre las que se asienta la nueva política agraria común. La condicionalidad, que tiene una repercusión directa en el regadío, y que en base a distintas tablas de respeto medioambiental, gravará, porcentualmente, el consumo de agua para riego. No soportarán esa tasa los cultivos que reciban agua por el sistema tradicional o por inundación. En la zona dependiente de la margen izquierda del Porma comparten esa condición de retraso la superficie situada al norte de la A-231, por decisión de los propietarios que en el 2005 se negaron a aceptar la solicitud de modernización, igual que sucedió ahora en Los Oteros.