| Visto y oído |
Ni buñuelos ni huesitos: ahora setas
Una en Cochús Nemesio Jiménez, un vecino de Los Barrios de Gordón, halló ayer una seta comestible de la variedad Cándida en el paraje conocido como Cochús, donde se encontraban otros ejemplares de características menos señaladas, informa desde La Robla J. A. Barrio Planillo . Nemesio es muy aficionado al mundo de los hongos, y ya desde su juventud visitaba los principales montes de los parajes de Gordón, donde se están encontrando muchos ejemplares de setas comestibles, de buena calidad y tamaños especialmente aceptables. Este ejemplar presentaba unas medidas de 40 centíímetros de diámetro y 1.500 gramos de peso, en una circunferencia de 120 centímetros. Otra en La Bañeza Dos vecinos de la localidad leonesa de La Bañeza en León encontraron un seta gigante mientras paseaban por una chopera en las inmediaciones de la carretera Nacional VI, en el cruce de Palacios de la Valduerna. Maximino Fernández y Tomás Otero, jubilados los dos, hallaron este hongo de más de cuatro kilos y medio, formado por la unión de tres plantas con un diámetro total de 42 centímetros, valores muy superiores a los habituales. Esta variedad de seta denominada como Gymnopylus Spectabilis o Pholiota, aparece a finales de verano y en otoño en enormes grupos sobre troncos de coníferas y caducifolios en los bosques de toda la Comunidad de Castilla y León. Su sombrero normalmente presenta un diámetro de 15 centímetros y se caracteriza por ser carnoso y convexo. En la madurez, adquiere una forma ligeramente ondulada. El pie es cilíndrico con la base bulbosa, de color igual al sombrero. Destaca por tener un color anaranjado, cercano al marrón y en algunos casos rojo pardo. A pesar de tener un olor agradable y un sabor amargo, los expertos en micología no recomiendan su ingestión ya que es venenosa podría producir intoxicaciones de tipo alucinógeno por lo que es conocida como «seta de la risa» por los efectos que ocasiona. Y para acompañar, buen vino El centro leonés en Cataluña, bajo la permisa de promocionar los productos y empresas leonesas, organizó el día 28 de Octubre de 2006, una exposición de los vinos de las Bodegas Vile reconocidos en toda la Península por su elaboración y selección de uva, sus vinos están presentes también fuera de nuestras fronteras. La presentación de los vinos corrió a cargo de Antonio Gómez, etnólogo desplazado desde León dando una conferencia sobre la historia del vino. En el mismo acto se presentó la Cecina de León, cedida por el Consejo Regulador de la Cecina de León de gran consumo en Cataluña por su calidad.