La sublimación de lo leonés

«Lo que pudiera contar es casi lo mismo que lo que pudiera recordar de un sueño, o de un mal sueño para ser más exacto. A veces pienso que un memorial sería lo más adecuado: poner sencillamente las palabras al servicio de los recuerdos, ordenadas con el único fin de que el olvido no se haga dueño y señor de ese reino de la nada en que se convertirá Celama». Es el primer párrafo de El espíritu del páramo , la obra del escritor y académico de la RAE Luis Mateo Díez que mañana el Diario de León entrega a sus lectores al precio simbólico de 1.50 euros. Se trata del segundo volumen de la Biblioteca Leonesa de Escritores tras Cuentos del noroeste mágico del villafranquino Antonio Pereira. La Biblioteca Leonesa de Escritores es el gran proyecto editorial con el que este periódico llevará a los hogares leoneses más de medio millón de libros con motivo de su Centenario: serán 52 obras de 48 autores, tanto nacidos en el viejo reino como vinculados en vida y en obra a la tierrina . Mañana le toca el turno al novelista lacianiego Luis Mateo Díez con la obra fundacional de la saga literaria sobre el territorio mítico de Celama, El espíritu del páramo . Entre lo real y lo soñado Sublimación, intensa destilación legendaria del Páramo leonés, este libro reúne quince historias extraordinariamente evocadoras, quince retazos de vida palpitante arrancados de las inhóspitas arcillas paramesas. Son quince historias de supervivientes, de paisanos que por encima de los duros trabajos, del dolor, de la emigración y aun de la misma muerte y desaparición, conservan la dignidad e incluso el humor. Historias como la del alemán que desafía la dureza de la tierra abriendo pozos, la de los amores furtivos de Elirio y Vina, la del recorrido del moribundo Rivas para despedirse de su amada comarca, la de la fastuosa comida que Roco ofrece a sus acreedores o la que nos narra el día de excesos y derroche con que la familia Leza celebra hasta la aniquilación su repentina prosperidad. El prólogo del libro ha sido elaborado por Asunción Castro, profesora de la Universidad de Castilla-La Mancha y una de las estudiosas que más profundamente han analizado la obra del escritor de Villablino. Además, Castro también ha investigado con intensidad las claves literarias de la obra del erudito Sabino Ordás, con quien tan fuerte vinculación tuvo Luis Mateo Díez. De la obra que mañana llega a manos de los lectores del Diario dice Castro que es «la obra que abre la trilogía de Celama, considerada unánimemente por la crítica como una culminación en el proceso creativo del escritor». El autor, asegura Castro, considera a Celama «un territorio del alma». Y así, éste no es sólo un espacio físico marcado por la frialdad heladora, sino que es sobre todo metáfora «del abandono, la ruina, la soledad».