Los niños son la principal mano de obra en los campos de cultivo de coca

El 92 por ciento de los niños peruanos de un selvático valle trabaja en la recolección y secado de la hoja de coca, principal insumo de la cocaína, por poco más de un dólar diario como única forma de subsistencia, informó ayer un diario local. Un estudio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) reportó que el 92 por ciento de niños de la zona del selvático valle de los ríos Apurímac y Ene, entre 6 y 17 años, trabaja en deshojar, secar y embolsar la hoja de coca en los campos de cultivo en los que se producen unas 53.000 toneladas al año. El diario El Comercio de Lima visitó la zona y comprobó que los niños se emplean por 3 (0,90 centavos de dólar) y hasta 5 soles (1,5 dólares) diarios por esa tarea con el consentimiento de sus padres, muchos de los cuales son asimismo cultivadores de coca. El 15 por ciento de los niños han sufrido cortes en las manos por trabajar con esas plantas filosas, según cifras de la Unicef, pero lo siguen haciendo porque es la única forma de subsistencia. El trabajo infantil en una actividad que reporta beneficios al narcotráfico y es aceptado incluso por las autoridades.