El viento aviva cuatro incendios en Castellón y cierra el puerto de Bilbao

El temporal de viento, que ayer ya comenzó a amainar, dejó a su paso por la Península y Baleares multitud de incidencias. Las fuertes rachas huracanadas avivaron cuatro incendios en Castellón, donde fueron desalojados 300 vecinos, cerraron el puerto de Bilbao, varios vuelos fueron suspendidos en San Sebastián, la fachada de un edificio en Salamanca quedó seriamente dañada y la cubierta del cuartel de la policía de Segovia hecha añicos. Como anécdota, el vendaval provocó la suspensión de la segunda etapa de la vuelta ciclista a Murcia. En la provincia e Castellón, las rachas de 80 kilómetros por hora mantenían activos cuatro incendios en la tarde del jueves. Uno de los más graves, localizado en el término municipal de Gaibiel, comenzó en la madrugada, al parecer por la caída de un tendido eléctrico. Las llamas llegaron a la sierra de Espadán sin que los medios antiincendios pudieran hacer nada, ya que el viento impedía su despegue. En Oropesa, a primera hora de la mañana del jueves el viento avivó un fuego que se extendió de forma rápida a las zonas de Balcó y la Renegá, y ha afectado a dos casas, una de las cuales quedó totalmente calcinada. Unos 300 vecinos han tenido que ser desalojados ante el riesgo de que llegase a una urbanización cercana. En Bilbao, la ventisca superior a los 150 kilómetros por hora y las olas de hasta ocho metros obligaron a la autoridad portuaria a cerrar las instalaciones, lo que dejó la madrugada del jueves en mar abierto a una decena de buques mercantes y al ferry El orgullo de Bilbao , que une la capital vizcaína y Portsmouth, en Gran Bretaña, con 600 pasajeros abordo, que tenía que haber desembarcado en Santurce el miércoles, y sólo lo pudieron hacerlo 24 horas más tarde. Una mujer resultó herida a causa de una caída. Fachada en ruinas El temporal de viento también huella a su paso por Salamanca, donde un edificio en pleno centro perdió los balcones y la cornisa, aunque las 32 familias que viven en él decidieron seguir en el inmueble de siete plantas. «Ha sido una suerte porque es una zona de muy transitada y podría haber ocurrido una desgracia», declaró el subdelegado del Gobierno Jesús Málaga. El vendaval también dejó sin cubierta al cuartel de la Policía Municipal de Segovia, que cayó sobre varios vehículos, y una mujer de 68 años, residente en El Espinar, fue trasladada al hospital por las heridas provocadas por el desplome de una valla en un edificio en obras. Para hoy, Protección Civil prevé que el temporal de viento amaine en toda la Península, aunque aún se encuentran bajo aviso por fuertes rachas de hasta 100 kilómetros por hora Baleares y Cataluña, y por riesgo de aludes Navarra y Huesca. El Instituto Nacional de Meteorología prevé la entrada de «una situación anticiclónica» con cielos despejados aunque el viento del norte «dejará una sensación de frío», afirmó su portavoz Ángel Rivera.