La inestabilidad permanecerá en el este hasta bien entrada la Semana Santa

La lluvia y la nieve seguirán bien presentes en el este del país en los próximos días, hasta bien entrada la Semana Santa, con especial intensidad en dos de las comunidades más afectadas este pasado fin de semana por un temporal que mantiene cortadas numerosas carreteras en Navarra y Aragón. La lluvia no cesó en muchas zonas de Navarra desde el domingo por la mañana y seguía cayendo con fuerza en Pamplona ayer a primeras horas de la tarde. Según las previsiones del Ejecutivo foral, la situación de máxima alerta estaba prevista a lo largo de la tarde en los ríos Ega y Arga. Las mismas fuentes destacaron el papel de contención del embalse de Itoiz a la hora de «rebajar el nivel de alerta en las cuencas de los ríos Irati y Aragón». En Navarra, 22 carreteras permanecían cortadas a primeras horas de la tarde debido a las precipitaciones que provocaron balsas de agua y la crecida de varios ríos de la cuenca del Ebro. Los principales problemas se registraron en la zona media de la comunidad foral y en la comarca de Pamplona, según fuentes del Gobierno de Navarra. En el entorno de la ciudad de Tafalla y las cuencas de los ríos Cidacos y Arga, se detectaron mayores caudales, mientras que en la comarca de Pamplona la crecida de los ríos se apreció especialmente en los ríos Arga, Elorz y Sadar. A primeras horas de la tarde permanecían cortadas en la red principal la NA-30, la carretera Pamplona- Tudela (N-121), y la N-113, Pamplona-Madrid, que permanece cortada desde el pasado miércoles en Castejón al romperse dos diques de contención del río Ebro. En la red secundaria nueve vías quedaron cortadas por inundación mientras que otras diez vías, también en la red secundaria, presentaron «problemas graves por balsas de agua». En Pamplona, el Ayuntamiento puso en marcha el plan de prealerta en zonas de la ciudad propensas a las inundaciones, cercanas al río Arga, como el polígono de Landaben, Errotazar o las inmediaciones del puente de Curtidores. La policía municipal cortó al tráfico la carretera del barrio de la Magdalena, junto al río Arga, así como la que comunica Pamplona con Cizur Menor, por la crecida del río Elorz. En Aragón la lluvia y la nieve obligaron a activar la alerta naranja en toda la comunidad hasta la noche de ayer por la posibilidad de nevadas con acumulaciones de hasta 20 centímetros de nieve. Ayer ya estaban afectadas más de 20 carreteras turolenses donde la nieve obligaba a usar cadenas. Además, las últimas lluvias han provocado el cierre de alguna carretera, como la A-204 en Ejea de los Caballeros, que tuvo que ser cortada al tráfico por el desbordamiento del río Arba. También se encontraban cerradas a la circulación la A-138 en Bielsa por desprendimientos; el puerto del Portalet en su vertiente francesa; y la comarcal que pasa por la localidad zaragozana de Used. En las últimas horas de ayer se registraron intensas precipitaciones que alcanzaron los 49 litros por metro cuadrado en Sos del Rey Católico (Zaragoza), superaron los 30 en Huesca y los 20 en Zaragoza capital. El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, José Luis Alonso, alertó de la llegada de una inminente riada en el cauce del Ebro.