Las posturas de los países ricos y los pobres se endurecen en la sede de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió ayer a los países en desarrollo que necesitan de la ayuda internacional para lidiar con el virus de la gripe aviar y que si no comparten toda su información, el organismo de la ONU no podrá ayudarlos. «Quiero ser honesta: Ustedes no tienen capacidad ni recursos para combatir solos esta amenaza. Yo haré todo lo que pueda para ayudarlos, pero les fallaré si no comparten conmigo toda la información, porque eso es como atarme las manos, cubrirme los ojos o taparme los oídos», defendió la directora general de la OMS, Margaret Chan. Durante su intervención en una sesión técnica de la 60 Asamblea Mundial de la Salud, que se reúne hasta el 23 de mayo en Ginebra, Chan se refirió así a la polémica creada por la negativa de Indonesia, el país más afectado por la gripe aviar, a compartir las muestras del virus H5N1 recogidas de las víctimas. Órdago de Indonesia Indonesia, que ha facilitado sólo una parte de sus muestras a la comunidad internacional, no cooperará plenamente hasta que no se le garantice que, en caso de pandemia, tendrá suficientes vacunas a un precio preferente y que los laboratorios le transfieran la tecnología necesaria para fabricarlas. «De todos los virus con que tenemos que lidiar, este es el más impredecible», al mutar miles de veces al día, por lo que «se trata del mayor reto (sanitario) al que se enfrenta el mundo», advirtió la doctora china. Compartir información En su opinión, compartir la información genética sobre el virus es «fundamental» para mejorar en los procesos de diagnosis, lo que permitiría reaccionar con la máxima agilidad ante la aparición de los primeros casos de contagio entre humanos, y de supervisión de mutaciones, con lo que se aceleraría la detección y aislamiento de la cepa necesaria para desarrollar una vacuna eficaz. Pese a esa petición de Chan, los miembros de la OMS continúan discutiendo una resolución presentada por la organización internacional sobre las obligaciones y derechos de los países en materia de intercambio de información del virus y tecnología para fabricar vacunas.