Gran Bretaña permitirá crear embriones de animales y humanos
El Gobierno británico presentaba ayer el borrador de una nueva ley de fertilidad en la que se contempla entre otras cosas la posibilidad de que los científicos británicos puedan crear embriones híbridos mediante la unión de material genético de seres humanos y animales. De esta manera el ejecutivo británico da un giro completo a la política de rechazo de esta práctica mantenida desde la promulgación de la Ley Embriológica y de Fertilización Humana de 1990. El objetivo de estos embriones híbridos es su utilización en la curación de enfermedades degenerativas, como pueden ser el párkinson y el alzhéimer. La propuesta de ley permitirá a los científicos la creación de tres tipos distintos de embriones híbridos humano-animales, se les consentirá que se desarrollen en condiciones de laboratorio por un máximo de tiempo de dos semanas. Será ilegal el implante de estos embriones en seres humanos. El primer tipo es el que el estudio describe como embrión quimérico, creado mediante la inyección de células de un animal en un embrión humano. El segundo es llamado embrión humano transgénico, por el que se inyecta ADN de un animal en un embrión humano. Y el tercero es el híbrido citoplásmico, creado al transferirse el núcleo de células humanas a los óvulos animales en los que se ha eliminado todo el material genético. Este es el tipo de embrión que está siendo desarrollado en las universidades británicas ya que los científicos aseguran que estos embriones ofrecerán una gran fuente de células madre para su uso en la investigación médica. En un intento por calmar a la opinión pública que pudiera rechazar este tipo de investigación científica, en la propuesta de ley se recoge la prohibición de crear embriones «realmente híbridos humano-animales» que serían el resultado de fertilizar óvulos humanos con esperma animal o viceversa. Aunque la propuesta ha sido rechazada por científicos, grupos pro vida y hasta por el primer ministro, el informe del comité parlamentario prohibir totalmente la creación de embriones híbridos «podría dañar los avances de la ciencia».