En España se desechan al año 20 millones de teléfonos móviles que se pueden reciclar
Ha iniciado su andadura la campaña Tragamóvil 2007, una iniciativa destinada a la recogida y reciclaje de teléfonos móviles, que tiene como objetivo evitar que sus componentes se mezclen con la basura doméstica y lleguen a los vertederos, contaminando el agua y el suelo. A lo largo de este año, Tragamóvil tratará de concienciar a los ciudadanos sobre la importancia que tienen este tipo de residuos y la necesidad de que sean reciclados como fórmula para prevenir la contaminación y fomentar el desarrollo sostenible. El «Autobús del Tragamóvil», un aula medioambiental, recorrerá hasta el próximo mes de septiembre las distintas comunidades autónomas. Cuenta con puestos informáticos en los que los visitantes podrán interactuar con material formativo y pedagógico, así como con un grupo de especialistas en la materia que aclararán cualquier duda que se pueda plantear. Tragamóvil ha lanzado un blog (www.lacoctelera.com/elblogdeltragamovil) que pretende ofrecer a los internautas una plataforma para informar sobre los aspectos referidos al reciclado de este tipo de residuos y ofrecerles la posibilidad de que planteen las preguntas que deseen. Desde su creación, y en los 360 puntos de recogida repartidos por la geografía nacional, de los que 14 están en Castilla y León, Tragamóvil ha recogido más de 700 toneladas de residuos celulares (teléfono, cargador, manos libres, auriculares) cifra, que aunque parezca elevada no lo es tanto si se tiene en cuenta que cada año se desechan en España 20 millones de terminales muchos de los cuales acaban en la basura o abandonados en cualquier lugar. Una vez retirados, los móviles son enviados a la planta de tratamiento ubicada en Bilbao en la que se desmontan y clasifican sus accesorios (cargador, antena, teclado, carcasa, batería, placa de circuito, pantalla). Desde Tragamóvil se recuerda que puede ser reciclado el 90% de sus componentes, lo que supone un importante ahorro en materias primas y recursos naturales. Indica, además, que los móviles contienen algunos elementos contaminantes como cadmio (en los más antiguos), níquel o litio que no deben ser derivados al vertedero junto con la basura doméstica por el daño que pueden causar al medio ambiente. De cara al futuro, los fabricantes apuestan por carcasas de fácil separación o por tornillos de plástico que, además de suponer un menor coste, facilitarán el tratamiento y la recuperación de los componentes.