Particular cuenta atrás de Paris Hilton

La heredera de un gran emporio hotelero, Paris Hilton, vive sus últimas horas de libertad antes de que el martes ingrese en una cárcel de mujeres en Los Ángeles, donde la joven más retratada por los paparazzi cumplirá una pena de 45 días. La bisnieta del fundador de la cadena de hoteles que lleva su apellido, fue sentenciada el 4 de mayo a pasar más de un mes presa por violar los términos de su libertad condicional por manejar con el carné suspendida después de haber sido detenida conduciendo en estado de ebriedad. La joven de 26 años «famosa por ser famosa», como la definió un académico en cultura popular de la universidad de Syracuse, vive sus últimas noches de eventos sociales en Hollywood mientras su publicista Elliot Mintz sostiene que no puede «emitir ningún comentario» sobre la situación de su cliente. Paris Hilton debe presentarse el 5 de junio en las puertas de la cárcel de mujeres de Lynwood, un barrio a no más de 25 kilómtros de su casa de Hollywood, pero a años luz de las costumbres cotidianas de esta chica que además actúa con su amiga Nicole Richie en un 'reality show' llamado 'Simple Life' (Vida Simple). En esta ocasión no existe ninguna oportunidad de que esta veinteañera se beneficie de una liberación rápida por sobre-población carcelaria como le sucedió a la actriz Michelle Rodríguez el año pasado, aclaró el portavoz del Departamento del Sheriff de Los Ángeles, Steve Whitmore. No obstante, y como establecen las reglas para todos los detenidos, bien podría obtener la libertad por buena conducta a los 23 días de estar tras las rejas del Century Regional Detention Facility, indicó hace dos semanas el mismo oficial del Sheriff. En los últimos días Paris Hilton ha provocado aún más frenesí entre los fotógrafos de celebridades que intentan dejar testimonio de cada paso que da la joven omnipresente en la prensa rosa y que ha aparecido incluso con su madre, expresando su consternación frente a «esta medida que no merezco», como dijo escuetamente a los reporteros en las puertas de su mansión. Para su hermana menor, Nicky Hilton, el error «tenía que ser absolutamente castigado, pero ir a la cárcel por una violación de tráfico es bastante absurdo», opinó el jueves en la noche al lado de Paris, en una fiesta de famosos en un hotel de Beverly Hills. La chica que en 2003 tocó la fama al colgarse en internet un video sexual con su novio, intentó incluso llevar a cabo una campaña en la red pidiéndole a sus fanáticos firmar una carta para que el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger la perdonara. «Tengo cosas más importantes en que pensar», respondió el ex actor. «FREE PARIS HILTON petition» (Petición para liberar a Paris Hilton), como se llamó la carta colgada en el sitio de internet Myspace y firmado por la joven millonaria fue un éxito de visitas, pero en varias ocasiones ganaron en audiencia páginas que pedían que no se tuviera clemencia con esta chica. En cuestión de horas ingresará en la cárcel y los medios especulan que lo hará de madrugada para evadir a la prensa, tampoco descartan que ingrese durante este fin de semana o el lunes. Una vez dentro, estará sola en una celda y deberá seguir el estilo de vida de cualquier detenida, enfatizó el portavoz del Sheriff negándose a detallar las medidas de seguridad por la llegada de Hilton a la cárcel el martes: «Haremos todo lo necesario» pero no habrá medidas especiales para ella. Mientras la imagen de esta joven rubia, delgada y casi siempre de vestidos cortos roba las portadas de revistas rosa, una encuesta de Forbes.com reveló que Hilton y la cantante Britney Spears encabezan la lista de las celebridades que el público ya considera como «demasiado vistas», pero que ahí siguen.