La DGT avala el carné por puntos porque reduce mucho la mortalidad

El carné por puntos ha logrado en su primer año de funcionamiento reducir la mortalidad en las carreteras españolas, en algunos meses incluso de forma «significativa», según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), que estima de forma positiva su implantación aunque admite que «no es la panacea». Así lo anunció ayer el subdirector de la DGT, Antoni Riu, durante una rueda de prensa convocada en el marco del Salón del Automóvil para presentar los resultados estadísticos del primer año de implantación del carné por puntos, que sin embargo no se han facilitado, a la espera de que sea el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien lo haga próximamente en el Congreso. Riu, que ha comparecido en lugar del director de la DGT, Pere Navarro, que no ha podido acudir a Barcelona debido a una enfermedad, ha evitado dar los datos estadísticos y se ha limitado a afirmar que desde que en julio del pasado año entró en vigor el carné por puntos, en el conjunto de España cada mes ha habido menos muertos en las carreteras que en el mismo mes del año anterior, e incluso en algunos casos con una reducción «significativa». Se da el caso de que en la misma rueda de prensa, el director del club de automovilistas españoles (CEA), Rafael Fernández, explicó que según un informe de esta agrupación el descenso de la siniestralidad en las carreteras tras la implantación del carné por puntos ha llegado a salvar de media una vida al día. Por otra parte, el subdirector de Tráfico no quiso dar datos sobre el número de conductores que han perdido los doce puntos, y se limitó a apuntar que, sin contar con Cataluña y el País Vasco -donde esta gestión está traspasada-, un total de 517 conductores han participado en cursos para recuperar cuatro puntos. «No es la panacea» Riu aseguró que la DGT hace una estimación positiva de la implantación del carné por puntos, porque «está vivo y muy vivo», ya que ha supuesto «un antes y un después» en las carreteras españolas, si bien admitió que «no es la panacea» ya que requiere de otras ayudas «porque es una herramienta, pero no la única», en contra de la siniestralidad. Como principal punto a corregir, Riu apuntó que se debe mejorar la rapidez en la tramitación de la retirada de los carnés a los conductores que han sido sancionados con la pérdida de los doce puntos, porque actualmente llegan a tener un margen de hasta seis meses. Desde que se implantó el carné por puntos, en Cataluña se han tramitado 62.000 expedientes que han restado 190.000 puntos, en la mayoría de los casos por exceso de velocidad (52%). En el País Vasco se han abierto 46.000 expedientes, que han acarreado la pérdida de 181.000 puntos.