Cada año se detectan en España 25.000 nuevos casos de cáncer de colon

Según se informa desde la Sociedad Española de Oncología Médica, el cáncer de colon es el tumor más frecuente entre los españoles, registrándose 25.000 nuevos casos cada año. Aunque no se conocen bien las causas que lo originan, las sospechas se centran en los malos hábitos de vida, especialmente la ausencia de una dieta equilibrada y la falta de ejercicio. Durante la última década, la mortalidad provocada por esta patología se ha incrementado en un 0,1% anual. Por eso, la citada Sociedad ha puesto en marcha una campaña destinada a concienciar a los ciudadanos sobre la importancia de vigilar la salud y tomar medidas preventivas que contribuyan a evitar la enfermedad. «Prevenir el cáncer de colon es fácil si se practican unos sencillos hábitos de salud», es el mensaje que se quiere transmitir a la sociedad a través de una consulta instalada en un autobús que ya ha empezado a recorrer la geografía nacional, en el que se recomienda una dieta rica en fibra, vegetales y fruta, y abandonar el sedentarismo. Los oncólogos afirman que el proceso se inicia con la aparición de un pequeño pólipo provocado por el crecimiento anormal de las células en la pared intestinal que, al cabo de unos años acaba convirtiéndose en un tumor. Con mayor prevalencia entre los hombres, suele aparecer pasados los cincuenta años de edad, aunque en los últimos años se está detectando cada vez a edades más tempranas. La detección precoz en fundamental. Desgraciadamente, este tipo de cáncer no suele dar síntomas hasta que se encuentra en una fase avanzada, siendo los más comunes dolor abdominal o cambios en las heces. El diagnóstico se suele hacer mediante un análisis de sangre, tacto rectal, una sigmoidoscopia (tubo con iluminación), una colonoscopia (método más preciso) o una biopsia. En la actualidad, más del 60% de los pacientes llegan a curarse, empleándose la cirugía en todas las etapas de extensión del cáncer. Los tratamientos con quimioterapia de última generación están dando buenos resultados, concretamente los conocidos como «anticuerpos monoclonales», capaces de reconocer a las células tumorales, actuar directamente sobre ellas (como los antibióticos) y reducir el tamaño del tumor, convirtiendo en operables cánceres que previamente no lo eran.