El tesoro de Odyssey es español y se halló en aguas internacionales

El tesoro rescatado por Odyssey Marine Exploration (OME) pertenecía a un barco de bandera española y fue hallado en aguas internacionales. Así lo señala la información que manejan los ministerios españoles de Exteriores y Cultura. Y así lo aseguró ayer Carmen Calvo, titular de Cultura, en su comparecencia ante el Congreso. Calvo repasó las actuaciones de la administración española en relación con el polémico hallazgo y confirmó que se librará una batalla contra la empresa cazatesosoros estadounidense en los frentes diplomático y judicial. Un litigio que reclamará las 17 toneladas de monedas de oro y plata valoradas en casi 400 millones de euros. Calvo, que mantuvo un agrio rifirrafe con la portavoz popular en la comisión, Beatriz Rodríguez Salmones, aseguró que su departamento trabaja con dos hipótesis «simultáneas y no excluyentes». «Creemos que se trata de un cargamento extraído de un pecio de bandera española que se ha encontrado en aguas internacionales», aseguró Carmen Calvo. «Toda la investigación realizada hasta ahora, los datos obtenidos sobre las posiciones de los barcos y otros elementos que forman parte de las actuaciones realizadas nos conducen a creer que esta hipótesis es la más verosímil», sostuvo la ministra. La segunda hipótesis «se refiere a las presuntas actividades ilícitas de la empresa Odyssey por presunto expolio» y que están bajo investigación del juzgado de Instrucción número uno de la Línea de la Concepción. Demanda federal Junto al proceso penal planteado ante la justicia española, recordó Calvo que hay otro proceso civil abierto ante los tribunales estadounidenses y como al tiempo «estamos realizando constantes gestiones de carácter diplomático». «Espero -concluyó la ministra- que todas las gestiones den como fruto lo que todos queremos y deseamos, que nuestros legítimos intereses en defensa del patrimonio histórico subacuático queden protegidos». Cultura ha exigido la identificación del pecio y su localización mediante la demanda presentada en Estados Unidos para que se respete su derecho si se confirma que el pecio es español. El hallazgo de las 17 toneladas de oro y plata en monedas, en la operación que OME bautizó como Cisne negro , fue comunicado el pasado 18 de mayo. La empresa no precisó el punto del hallazgo, información que han reclamado sin éxito las autoridades españolas. El pasado 31 de mayo España presentó una reclamación ante un tribunal federal de Tampa (Florida), ciudad en la que está radicada la empresa cazatesoros . Notificaba a las autoridades y a Odyssey que no ha renunciado a su soberanía sobre cualquier barco español que la empresa hubiese hallado, ya fueran un navío hundido bajo su servicio o con carga perteneciente al Reino de España. La historia vale más que el oro Calvo aseguró, no obstante, que el valor del pecio no hay que medirlo en términos económicos y sí «en función de la información histórica que aporta sobre nuestro pasado, que es un bien de todos». «España no defiende intereses mercantiles y sí lo que los ciudadanos nos demandan, la protección del patrimonio subacuático», dijo. Un patrimonio que sufre, a juicio de la ministra, una creciente explotación comercial. Odyssey ha negado con reiteración que el pecio rescatado fuera el del HMS Sussex , el barco británico hundido en aguas del estrecho de Gibraltar en 1694 y para cuya exploración logró los permisos de España y Reino Unido. Diplomacia Durante más de una hora Calvo explicó en sede parlamentaria todo lo actuado por las autoridades españolas desee que en 1999 el Ministerio de Cultura concediera permiso a OME para buscar en aguas del Estrecho el pecio de HMS Sussex. En 2001 el mismo ministerio autorizaba la extracción «de algunas pieza arqueológicas a un supuesto buque colonial inglés». Calvo era entonces consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, que tiene atribuida esta competencia, y suspendió la autorización. Exteriores está librando la batalla diplomática y a través de una nueva nota verbal ha solicitado a las autoridades británicas que entreguen la licencia de exportación de las monedas. Expedida en Gibraltar el 17 de mayo, es el documento que permitió la salida del tesoro con dirección a Florida a bordo de un avión. Exteriores había planteado una primera reclamación el pasado 22 de mayo por la salida de las monedas con destino a Florida, ya que la empresa estadounidense sólo tenía permiso para localizar pecios.