| Visto y oído |
En honor a la memoria Matanza revive y avanza
Enfermos de alzhéimer La Asociación de enfermos de alzhéimer de Santa Marina del Rey celebró por segunda ocasión en el camping de esta localidad, una jornada lúdica, en la que participaron 100 personas, con el fin de facilitar el encuentro entre estos familiares. Durante todo el día se desarrollaron numerosas actividades, todas ellas con el objetivo de que el enfermo mejore y que se potencien las capacidades que todavía poseen como son las motoras y las cognitivas. Para ello tuvieron lugar diversos bailes y paseos, así como charlas y ejercicios con objetos que formaron parte de sus vidas hasta la llegada de la enfermedad, para que los reconozcan y les ayuden a asociarlos con etapas pasadas, haciéndoles recordar y ejercitar la mente, paliando, en la medida de lo posible, el avance y los efectos de esta terrible enfermedad. Además, para todos se organizaron bailes regionales a cargo del grupo de danzas de Velilla de la Reina y también juegos tradicionales como el de la tarusa, la rana, los bolos y las cartas. Fiesta del emigrante Con motivo de la fiesta anual del emigrante en Antoñán del Valle, pedanía del municipio de Benavides de Órbigo, tuvo lugar el pasado 11 de agosto un pequeño, pero entrañable acto, en el que se dieron cita los más de sesenta hijos del pueblo que han trabajado o trabajan en la empresa de neumáticos Michelin en sus distintos centros de Lasarte, Vitoria, Aranda y Valladolid, así como en las diversas instalaciones de su red comercial. No es un hecho extraordinario que desde esta pequeña localidad de poco más de doscientos habitantes hayan emigrado muchas personas, pero sí lo es que muchos de ellos terminaran trabajando en la misma empresa, que en esta ocasión ha querido conmemorar el hecho manifestando su agradecimiento y reconocimiento a los hombres y mujeres de este pueblo. El pionero de este nutrido grupo de emigrantes que acabó en el sector del neumático es Marcelino Fuertes Cantón, hoy jubilado, que en noviembre de 1966 ingresaba en la sucursal Michelin de Valladolid. Poco a poco, y vistas las buenas condiciones que ofrecía el trabajo, se fueron uniendo a él su hermano Feliciano, su cuñado, sus primos, hasta los doce miembros de su familia que actualmente trabajan en la compañía, entre ellos dos de sus hijos. Además, la voz debió correr por todo el pueblo, porque hoy ya son sesenta y uno los nacidos en la localidad que trabajan a en esta misma empresa y que se han reunido ahora en su patria chica. El paseo que devuelve a los habitantes de matanza a las costumbres y modo de vida de las generaciones inmediatas alcanzó ayer la edición número 17. Diecisiete veranos de recorrido sobre los parajes de la localidad, para mostrar a las nuevas generaciones cómo se hacía la vida décadas atrás. También se echa la parva, con la receta de antaño, a base de huevos y sopas de ajo. Este pueblo del sur, del sur leonés, no olvida la senda de sus antepasados. Y a la vez, avanza.