Un 30% de los alumnos de ESO en España no acabarán el ciclo obligatorio
Treinta de cada cien niños y niñas que esta semana han pisado por vez primera el colegio, en el inicio del curso escolar 2007-2008, abandonarán definitivamente las aulas al concluir la Secundaria Obligatoria, o incluso antes, si no se ataja este grave problema social, que no remite. La ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, reconocía esta misma semana en el Congreso que el 29,9% de abandonos en 2006, una constante en los últimos años, supone una cifra «muy alta» e «insostenible en el futuro». Hay incluso quien considera, como Isabel Bazo, presidenta de la Confederación Española de Centros de Enseñanza, que ese porcentaje, ya de por sí preocupante, es «mucho más elevado», según comentó a Efe. El 29,9% de abandonos supone casi el doble de la media europea, que se sitúa en el 15,3%, si bien la UE se ha propuesto como objetivo común para 2010 rebajarlo al 10%. Más chicos que chicas El fracaso escolar es más frecuente entre los chicos (36,3% en 2005) que entre las chicas (22,5%), y más grave en los colegios públicos que en los privados -casi el doble-, aunque Pedro Rascón, vicepresidente de Ceapa (Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos) cree que en ésta última, «al haber menos control, es más fácil enmascarar la incidencia». «Los privados concertados -denuncia Augusto Serrano, portavoz de la Confederación de Sindicatos de Trabajadores y Trabajadoras de la Enseñanza (STES), el segundo más representativo después de CC.OO.- seleccionan su alumnado», eligiendo a los que no tienen problemas, «saltándose a la torera la ley». Por comunidades autónomas la situación es muy desigual, con tasas que en los casos de Asturias (14,9%), País Vasco (16,5%) y Navarra (18,5%) están muy por debajo de la media, superada en Baleares (38,2%), Comunidad Valenciana (35,9%) y Canarias (35,2%), según datos del 2005 facilitados por FETE-UGT. Según la OCDE, España ocupa el puesto número 23 en el ránking de fracaso escolar, con Brasil, Turquía y México por debajo, en una lista que encabezan Noruega yAlemania.