El Campus hace la vendimia

Las variedades autóctonas del Bierzo, Mencía y Doña Blanca, ya son universitarias y ayer llegaron al Campus de Ponferrada directamente de la vendimia, en la que se afanan decenas de bodegas y cooperativas de la comarca para elaborar los distinguidos vinos con denominación de origen Bierzo. En esta ocasión, es la reconocida bodega Dominio de Tares quien colabora con los estudiantes de Ingeniería Agroalimentaria en la elaboración de sus caldos, que tendrán ahora su segunda añada, ya que este año ya produjeron un total de 1.000 botellas de tinto y clarete. En la mañana de ayer, el bodeguero de Dominio de Tares, David Castelo, descargó en la planta piloto ubicada en el Campus del Bierzo un total de 800 kilos de uva Doña Blanca y otros tantos de Mencía, que en los próximos días se verán ampliados con otros 800 kilos de la segunda variedad, que entonces serán empleados para realizar un tinto joven. Y es que el objetivo es que de esta bodega universitaria salgan unos exquisitos y aromáticos caldos, en su variedad de blanco, rosado y tinto. Una vez descargadas las uvas, llegadas de los viñedos que Dominio de Tares tiene repartidos entre Valtuille, Camponaraya, Villafranca y Cacabelos, los estudiantes -ya empapados en mosto- comenzaron con la elaboración del blanco monovarietal de Doña Blanca, que es de prensado directo y que no requiere despalillado anterior. A continuación este mosto se desfanga -eliminar restos de uva- y listo para iniciar las fermentación. La variedad Doña Blanca, aunque no es tan conocida como el Godello, el responsable de Dominio de Tares, Pedro González Mittelbrun, considera que es una uva «con futuro y de la que se puede obtener muy buen rendimiento» En los próximos días comenzarán la preparación de los rosados y tintos. Estos últimos son los que requieren más tiempo de elaboración. Uno de los primeros pasos es despalillar la uva mencía del racimo, estrujarla y después dejarla macerar en frío con una técnica especial, para la extracción de los máximos aromas y color. Este es uno de los pasos decisivos para la obtención de tintos de colores intensos y aromáticos. Al igual que con el blanco, el mosto resultante se escurre y se desfanga para dejarlo en fermentación, que en las instalaciones del Campus del Bierzo se realiza a baja temperatura, entre 13 y 15 grados. A través de esta colaboración, Dominio de Tares pone al servicio de los estudiantes ponferradinos los conocimientos y experiencia de sus bodegueros y enólogos, formándoles en este «arte del vino», mientras la bodega puede experimentar con nuevas técnicas y formas de elaboración. Por ejemplo, el rosado de la planta universitaria vivirá un proceso de elaboración radicalmente distinto al que se utiliza en otras bodegas de la comarca, con la aplicación de las últimas tecnologías. En unos meses se podrán catar esas casi 2.000 botellas que esconden los aromas y las texturas de nuestras uvas autóctonas