El índice de masa corporal para los militares no puede ser superior a 28 ni inferior a 18
La tartamudez deja de ser motivo de exclusión para entrar en el Ejército
Se mantienen los impedimentos en cuanto al peso, la altura o la falta total de pene
La tartamudez ha dejado de ser motivo de exclusión para entrar en los Ejércitos, según una Orden de Presidencia sobre el cuadro médico de exclusiones para ingresar en los centros docentes militares, que mantiene entre los impedimentos medir menos de 1,55 o más de 2,03, o la «falta total de pene», en el caso de hombres. El Boletin Oficial de Defensa (BOD) acaba de publicar la Orden de PRE 2622/2007, de 7 de septiembre, por la que se aprueba el cuadro médico de exclusiones exigible para el ingreso en los centros docentes militares de formación. La nueva normativa reúne en una única disposición todo lo referente a los cuadros médicos y como principal novedad elimina la disartria o tartamudez manifiesta como causa de exclusión general, aunque se mantiene para determinados puestos, como es el caso del personal con responsabilidad en vuelo. En cuanto a la talla, aparecen como motivo de exclusión una altura inferior a 160 centímetros o superior a 203 centímetros, con algunas excepciones. Para militar profesional de tropa y marinería se fija en una talla mínima de 155 centímetros y para la Escala Superior de Oficiales y Escala de Oficiales -especialidad fundamental de operaciones aéreas- del Cuerpo General del Ejército del Aire se establece entre 160 y 196 centímetros. Además establece unos pesos, calculados en función del índice de masa corporal, «cuyos parámetros no sobrepasen a 28 ni será inferior a 18, excepto para militar profesional de tropa y marinería en que no sobrepasará 29 ni será inferior a 18». Para la Escala Superior de Oficiales y Escala de Oficiales del Cuerpo General del Ejército del Aire, además, el peso mínimo será de 60 kilos.