Un estudio determina que el exceso de trabajoafecta a la cantidad y a la calidad del sueño
En un reciente estudio, realizado en EEUU y publicado en la revista Sleep, se afirma que mientras más horas se trabaja, menos cantidad de horas se duerme. Según sus autores, la relación entre actividad laboral y horas de sueño es tan elevada que de todas las actividades diarias de una persona las que transcurren en la oficina son las que después más afectan negativamente a su descanso. Quienes duermen menos de cuatro horas y media trabajan, en comparación con quienes descansan más de ocho horas, hora y media más de lunes a viernes. Y si se cuenta el fin de semana, el promedio llega a dos horas. Para la investigación, dirigida por Mathias Basner, de la Universidad de Pensilvania, se contó con la participación de 47.000 ciudadanos que fueron encuestados durante tres años, y a los que se preguntó, entre otras cosas, qué hacían diariamente entre las cuatro de la mañana de un día y las cuatro de la mañana del siguiente. Al computar los resultados se comprobó que quienes habían dormido 11 horas en ese espacio de tiempo habían trabajado, en promedio, 143 minutos menos durante los días de semana y 71 minutos menos de sábado a domingo. La comparación se realizó con aquellas personas que tuvieron un tiempo de descanso medio de ocho horas. Según los expertos lo recomendable para los adultos es dormir entre siete y nueve horas. La investigación también determinó que, después del trabajo, el factor que más influye en el sueño es el tiempo que se utiliza para llegar a la oficina. Quienes durmieron menos horas utilizaron el resto del tiempo estudiando, socializando y haciendo labores en el hogar. El estudio indica que al igual que en otros anteriores muchas personas tratan de abarcar demasiadas actividades, lo que repercute en la calidad de su descanso nocturno. Según los investigadores, el grupo de personas que menos descansó tenía entre 45 y 54 años. Indican, además, que habrá que realizar más estudios para determinar el impacto que tienen las jornadas laborales largas en la salud de las personas.