Cosas de aquí | Tecnología punta para el gigante asiático
Un robot berciano habla chino
Una empresa metalúrgica ponferradina, Sati, culmina el prototipo que se empleará en la excavación del metro de la ciudad olímpica de Shenyang, sede del fútbol en Pekín 2008
La economía China crecerá el año que viene a un ritmo del 11% y las ciudades del gigante asiático no saben lo que es el término recesión. Lo que no fabrican, lo importan para que el vértigo desarrollista no se detenga. Bajo ese espíritu, los más de cinco millones y medio de habitantes de Shenyang, la capital de la provincia de Liaoning, conocida ahora especialmente por haber conseguido la sede de las eliminatorias de fútbol de los Juegos de Pekín 2008, dispondrán muy pronto de un metro modernísimo. En su puesta en marcha cobrará un protagonismo tecnológico insospechado una empresa berciana. La metalúrgica Sati ha culminado la creación de un prototipo para las cabezas de las tuneladoras que horadarán el subsuelo de Shenyang y que colocará con absoluta precisión y máxima seguridad las bovedillas de hormigón prefabricado que recubrirán los túneles. «El robot trabajará de forma automática con una programación que favorece el trabajo continuado y optimiza los costes de ejecución». El jefe de producción de Sati, Felipe Hidalgo, es el ingeniero industrial que ha supervisado durante los dos últimos meses y medio la gestación de la máquina. Una mole de acero de más de 12,5 toneladas de peso y de unas dimensiones de tres metros de ancho por tres de alto, que hoy miércoles estará viajando ya vía aérea desde Getafe a su punto de destino en la futura ciudad olímpica china. Oportunidad de negocio En la factoría de Sati, donde La Rosaleda se funde con el barrio de Cuatrovientos, se preparan ya nuevos prototipos similares al encargado para la tuneladora por la empresa francesa que tiene la patente. El «robot tuneladora», como se ha bautizado sin demasiadas pretensiones al artilugio, puede estar presente muy pronto también en los pasos subterráneos del AVE entre León y Asturias. El precio de la máquina ronda los 150.000 euros, y su fabricación puede representar una nueva y prometedora vía para el incremento del volumen de negocio de Sati (Sistemas Avanzados de Transformación Industrial), una compañía que da empleo directo en la comarca berciana a más de un centenar de personas. El jefe de producción de la fábrica, Felipe Hidalgo, se mostraba ayer, en la despedida del robot tunelador, satisfecho por el trabajo desarrollado. Ahora, no obstante, habrá que aguardar a los resultados de la reválida que llegarán cuando la pieza comience a dejar su sello «berciano» en tierras chinas.