Todos los pueblos llevan a Afganistán

Sargento primero Elías, natural de Carbajal de Fuentes; sargento primero Fernández, originario de Méizara; sargento Vega, de Veguellina de Fondo; cabo Molaguero, descendiente de Bustillo de Cea, y soldado Provecho, nacido en Cabreros del Río. Estos cinco militares leoneses llevan prácticamente medio año destacados en Afganistán, a unos 6.000 kilómetros de León, dependiendo de si se sigue la ruta oriental o la occidental. Encuadrados en la Unidad de Apoyo Logístico, con sede en la Base de Apoyo Avanzado de Herat, son protagonistas de un inminente regreso. Unos lo han hecho ya y otros lo harán en las próximsa horas. Vuelven «orgullosos» de haber formado parte de una misión que ha sido amparada por varias resoluciones de Naciones Unidas y de la que forman parte más de 33.000 efectivos de 37 países. Su estancia no ha sido siempre fácil. Esta base da apoyo logístico a un área de responsabilidad de 145.000 kilómetros y su ayuda es esencial para la seguridad del personal desplegado en los equipos de reconstrucción provincial (PRT) que trabajan para la Agencia Española de Cooperación Internacional. Allí se encontraban destacados los 17 tripulantes del helicóptero Cougar siniestrado hace casi dos años y los soldados muertos en el atentado con una mina en septiembre de este año. Días a 60 grados Partiendo de que no es un destino fácil, los cinco leoneses relatan desde Afganistán que han dedicado «muchas horas al trabajo diario», en ocasiones soportando temperaturas de más de 60 grados centígrados. «Aunque siempre hay un momento a lo largo del día para jugar una partida de cartas entre compañeros», explican a través de Internet. Es la vía que utilizan para contactar con su familia -«ellos son los que realmente soportan el peso de la misión», manifiestan-. Pero su ingenio va más allá y han ideado unos carteles con sus poblaciones de origen para dejar constancia de los kilómetros que distan a León de la base militar. Para el sargento primero Fernández, el sargento Vega y el soldado Provecho ésta es la primera misión internacional en la que participan, no así para el sargento primero Elías y el cabo Molaguero. El área controlada por estos militares en el oeste del sexto país más pobre del mundo incluye las provincias de Herat y Badghis, dos de las más desafortunadas del país, con más de un millón de habitantes. La miseria se ve en unas calles medievales y en una población desconcertada, sometida a la triple amenaza de los talibanes, los señores de la guerra y los narcotraficantes.