Mensajeros de la Paz recogerá regalos para 100.000 mayores
Ni sus arrugas o temblores han podido robarles su alma y corazón infantiles, esa protectora coraza de ingenuidad para sobrellevar estos tiempos de frenesí tecnológico y humanas soledades. Son los mayores que «también creen en los Reyes Magos», como pregona la organización no gubernamental Mensajeros de la Paz en su campaña de recogida de regalos para las personas de edad avanzada que viven solas, están enfermas o internadas en residencias y hospitales. En esta octava edición, el objetivo es que 100.000 sean un poquito más felices el 6 de enero. «No podemos permitirnos el lujo de olvidar a los mayores», remarcó al presentar la campaña su responsable Javier García. «La peor enfermedad es la soledad, pero la de los jóvenes podría ser el olvido», remachó. Y para que ese desmemoriado virus no se contagie entre las generaciones juveniles y adultas, Mensajeros de la Paz le ha dado este año un pequeño repaso a los sueños de quienes llevan con entereza su «vida cargada de años» y sienten palpitar ese «corazón que todavía tiene sabor a primavera». Por eso, como hizo Mariano en su carta a los Reyes Magos de una campaña anterior, piden «algún regalito que me haga revivir mi corazón entero», aunque sólo sea una pluma para «desahogarme escribiendo» o para entrenar las facultades mentales. En su lista de ilusiones y deseos caben los grandes sueños de toda la vida (paz, salud, felicidad), pero también las pequeñas cosas de cada día: medias y calcetines, zapatos y libros «con letra grande».