Cerrar

CRÉMER CONTRA CRÉMER

Un músculo único...

Publicado por
VICTORIANO CRÉMER
León

Creado:

Actualizado:

LA FRASE NOS ha cautivado: Dijo el Presidente: «Queremos un músculo financiero único». Se trata de la perspectiva que puede estar formándose en torno a las cajas de ahorro y montes de piedad, como la que preside Santos Llamas, hombre seguro de sí mismo y sobre todo de los derechos que le corresponden al resto del viejo Reino de León, todavía vivo y coleando en el mar de las fianzas. Y apenas se perdió el eco de la sugestión lanzada por el señor presidente, nada menos que Francisco Fernández, el regidor mayor de la municipalidad, saltó de su estrado para replicar: «Sí, pero con la sede en León». El problema se anuncia como complicado, confundidor y lesivo para los intereses de León, hasta que alcancemos el momento álgido de nuestra biografía y nos veamos desprovistos de todo estamento, colegio, asamblea o certamen, en el cual todavía la ciudad de León tiene cierta raigambre perfectamente defendida. Y es que el alcalde de la ciudad no puede olvidar que toda la historia de la decadencia de la ciudad se debe o se supone que se debe a que desde todos los lados de nuestra geografía se nos ha intentado y conseguido arrebatarnos privilegios, centros, industrias y toda clase de relevancia política, sin tener en cuenta o precisamente por tenerlo en cuenta, el predominio histórico y la voluntad casi heroica de los supervivientes de la Legio Séptima Gémina Pía Félix para el mantenimiento de nuestros fueros y derechos. Hasta el dialecto, que ya ven ustedes el escaso interés intelectual que juega el propósito de resucitar una lengua o idioma o dialecto absolutamente muerto, pese a todos los esfuerzos por levantar la losa de pereza y desidia que nos cubre, los leoneses son tercos y nada asegura que de nuevo vayamos a ser despojados, como cuando se nos arrancaron los Talleres de la Sociedad de los Caminos de Hierro del Norte de España, para ubicarles en Valladolid o aquella vez en la que se nos prometió la instalación de una fábrica relacionada con la industria del automóvil y también fue a parar a la Capital del Pucela navegable. Día tras día fuimos perdiendo influencia, prestigio e importancia. Y entre los pocos centros que nos quedan, aparece el de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de León (ahora Caja España) ya con un pie en el peldaño que nos llevará a viajar financieramente, que es lo suyo, para reconstituir un músculo financiero. ¡Ay de nosotros! Llegará un momento o quizá ya esté llegando, en que se produzca el despojo de nuestra caja de Ahorros y Monte de Piedad, ofreciendo como justificación de tan alevosa maniobra cualquiera de los manejos políticos que sirvieron para dejarnos desnudos como los hijos de la mar... Y no es por nada o por mucho, pero a mí personalmente me duele asistir a este posible enredo que dé con la Institución leonesa en agónica, sobre una capa de cenizas, bajo la cual estén enterrados los recuerdos más entrañables. Recuérdese que hubo un tiempo, sin duda más esperanzador que el que nos contempla, en el cual, los leoneses, contemplando la sombra de la xaja, rezábamos a la hora de acostarnos: Es la Caja de Ahorros/ nuestra segunda madre/que vela por nosotros/ para evitar el hambre... Quizá exageramos un poco, pero convendría montar la guardia y vigilar...