Se da la circunstancia de que en la mayoría de los casos las víctimas circulaban correctamente
Conductores en sentido contrario han causado seis muertos este año
Los expertos en seguridad vial piden contundencia en la aplicación de las penas
Seis personas han fallecido este año al colisionar contra un vehículo que circulaba en sentido contrario, en una docena de accidentes registrados hasta el 11 de febrero. Otras 24 personas perdieron la vida en 2007 en estas circunstancias. Lo llamativo de estos siniestros es que casi siempre las víctimas circulaban correctamente, mientras que los infractores quedan con vida, y que la tasa de mortalidad es más alta que en el conjunto de accidentes de tráfico. El presunto kamikaze que el pasado domingo causó la muerte a un matrimonio en Alicante ingresará en prisión en cuanto sea dado de alta en el hospital, por orden del juez, que le imputa dos delitos de homicidio, y descarta, al parecer, que circulara en sentido contrario por error. Los estudios vinculan estos sucesos con excesos de alcohol o drogas y distracciones por nocturnidad o una señalización ambigua, así como alteraciones psíquicas. Los expertos en seguridad vial y las asociaciones de víctimas reclaman contundencia en la aplicación de las penas, por conducción temeraria y desprecio por la vida ajena. Los conductores en dirección contraria causaron en 2007 la muerte a 24 personas en 70 accidentes en vías de doble calzada, según datos facilitados por el Observatorio de la Seguridad Vial. No se incluyen en la cifra los de carreteras secundarias, en las que en la misma calzada confluyen los dos sentidos, por la dificultad de determinar si es un accidente al pasarse al otro carril o un caso de circulación a contravía, explica su directora, Anna Ferrer. En enero de 2008 se registraron siete siniestros de este tipo y otros cinco en los once primeros días de febrero, con un total de seis muertes y varios heridos. «Sin peso» Son accidentes que, cuantitativamente, «no tienen peso» en el conjunto de siniestralidad y no se han estudiado con detenimiento, aunque dado que son llamativos, señala la directora del Observatorio, «vamos a profundizar, recopilar los atestados, declaraciones de testigos y revisar el punto de entrada, la señalización...». «Habría que hacer un estudio en profundidad», coincide el catedrático de Seguridad Vial de la Universidad de Valencia Luis Montoro, porque «no podemos permitir que la señalización o el diseño de la vía den lugar a un error, eso es lo primero, y luego actuar con medidas educativas y legales». La DGT denomina a estos infractores Conductores en Conducción Contraria (CCC). El catedrático Luis Montoro prefiere hablar de kamikazes, que en la última década -refiere- han provocado una media de 130 accidentes anuales, con entre 25-30 muertos cada año. La mitad de ellos ocurrió por la noche y un 25% bajo los efectos del alcohol, el 80% de los conductores eran varones y el 20%, extranjeros. La mayoría son errores del individuo o la señalización, los suicidas son un porcentaje mínimo.