Ecoturismo: una escapada para conocer nuestro medio natural

En Castilla y León aún se puede disfrutar de uno de los patrimonios naturales más ricos y variados de Europa. Hábitats típicamente mediterráneos, bosques atlánticos, estepas, impresionantes cañones fluviales, bosques, valles y lagunas glaciares conforman un mosaico de ecosistemas naturales, muchos de ellos ya desaparecidos en otras regiones de España y de la UE. Esta Comunidad ofrece un sin fin de recursos para disfrutar durante Semana Santa, las procesiones, historia, tradiciones, arquitectura y gastronomía. Pero si aún no ha decidido en qué va a emplear las próximas vacaciones le proponemos un recorrido por los espacios naturales. Son enclaves que permiten perderse durante unos días disfrutando del medio natural, el arte, la historia y las tradiciones de sus gentes. Antes de adentrarse en ellos es recomendable visitar las Casas del Parque (hay actualmente 22 en funcionamiento) para recabar información de todas las posibilidades que brinda el espacio natural y su entorno (valores naturales, culturales o sociales). Entre las actividades que se llevan a cabo en las Casas del Parque destaca el Programa V(e) 2 n, de visitas de escolares a los espacios naturales y el Programa Espacios Dorados, a través del «Club de los 60». Además, la Fundación Patrimonio Natural ofrece la posibilidad de visitar los espacios naturales a vista de pájaro a través de vuelos en globo aerostático, y durante los sábados de marzo a junio de este año, pone en marcha 17 rutas de observación de aves. Ávila Los espacios naturales abulenses están ubicados al sur provincial pudiéndose iniciar el recorrido en la Reserva Natural del Valle de Iruelas (vegetación con importantes endemismos y la colonia de buitre negro más importante de España), para continuar a lo largo de las Sierras de la Paramera y Serrota (variada orografía y presencia de castillos). El siguiente destino es el Pinar de Hoyocasero, un pequeño bosque caracterizado por su pluralidad botánica, para concluir en el Parque Regional de la Sierra de Gredos, el reino de la capra hispanica , una inmensa muralla granítica en la que destacan el pico Almanzor (2.592 metros), además de glaciares, circos, lagunas y depósitos morrénicos. Burgos El paisaje burgalés posee un relieve accidentado en el que montañas y llanuras conforman una gran diversidad paisajística convirtiendo a la provincia en una auténtica encrucijada botánica y biológica. De norte a sur, el itinerario puede realizarse visitando los Monumentos Naturales de Ojo Guareña (el conjunto de cuevas más importante de España) y Monte Santiago (con el Salto del Nervión), los Montes Obarenes (hoces, desfiladeros y cañones), las Hoces del Alto Ebro y Rudrón, La Yecla, los Sabinares del Arlanza, la Sierra de La Demanda y las Lagunas Glaciares de Neila. León La delimitación geográfica de la provincia cuenta con una gran variedad de paisajes, agrupados bajo los conceptos de montaña, meseta y río, que configuran la existencia de hermosos enclaves naturales. De oeste a este, el recorrido discurre por los Monumentos Naturales del Lago de Truchillas y del Lago de La Baña (ambos de origen glaciar), para adentrarse en El Bierzo visitando Las Médulas y subir hacia el norte para recorrer los valles que constituyen la Sierra de Ancares, con sus famosas pallozas. Después, se puede remontar el río Sil y atravesar las comarcas de Laciana y Babia (Valle de San Emiliano) para continuar en dirección este y disfrutar de las Hoces de Vegacervera (Cueva de Valporquero) y concluir en Picos de Europa (Parque Nacional y Regional), que incluye infinitas posibilidades montañeras adaptadas a todos. Palencia La provincia palentina sorprende al ecoturista al descubrir un paisaje montañés que discurre entre cumbres pedregosas de más de 2.000 metros y la más completa concentración de restos románicos de todo el continente que tienen su centro en Cervera y Aguilar. En el extremo norte se levanta una cadena montañosa con sombríos y extensos valles, hayas, robles, encinas y sabinas, aguas puras y limpias y una envidiable biodiversidad. Se trata del Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre-Montaña Palentina. Siguiendo hacia el este se llega a Las Tuerces (un laberinto de masas calizas) y Covalagua (con sus surgencias y cuevas) para concluir en el espacio natural de La Nava y Campos de Palencia, cuyas lagunas esteparias constituyen el lugar de cría e invernada de numerosas especies de aves. No se debe olvidar el Canal de Castilla, que cruza la provincia de norte a sur y brinda muchas actividades relacionadas con el ocio. Salamanca Son dos los atractivos básicos de la provincia salmantina: en primer lugar, cinco espacios naturales protegidos de extraordinario valor ecológico, paisajístico, piscícola y cinegético y, en segundo lugar, una variada riqueza en cuanto a artesanía, tradiciones, arte, monumentos, gastronomía y folclore. Todo esto hace de ella un lugar privilegiado, tanto para recorrer sus pueblos y parajes como para pasar unos días de vacaciones en un marco natural de espléndida belleza. El Parque Natural de Arribes del Duero (impresionantes cañones y cigüeñas negras), el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia (con su estrecho y mítico valle) y los espacios naturales de El Rebollar (con los mayores bosques de roble rebollo de la Península), Candelario (con su riqueza faunística, botánica, y gemorfológica) y la Sierra de Quilamas (robles melojos, buitres negros), son de obligada visita.