El 70% de las mujeres españolas viven asustadas porque creen haber usado mal los métodos anticonceptivos
Siete de cada diez españolas viven «angustiadas, asustadas y preocupadas» porque creen haber usado mal el método anticonceptivo que han elegido y, sin embargo, continúan manteniendo relaciones sexuales. De las que siguen practicando sexo, pese a dudar de la eficacia de la contracepción, el 39 por ciento confiesa que lo hace sin utilizar una protección adicional frente a un posible embarazo, lo que genera una tensión vital que sólo se libera con la llegada de la menstruación, convertida en estas ocasiones en una buena noticia. Estos son algunos de los datos del estudio más amplio realizado en España sobre las «consecuencias del uso incorrecto de los anticonceptivos hormonales», realizado por el Círculo de Estudio en Anticoncepción, y en el que participaron 26.250 mujeres de entre 18 y 49 años que usan la píldora a diario, el anillo mensual o el parche semanal. Ezequiel Pérez-Campos, presidente de la Fundación Española de Contracepción, explicó que las consecuencias emocionales que sufren por el uso incorrecto de anticonceptivos conllevan que el 20 por ciento no se concentre en el trabajo o estudio, que hasta un 4 por ciento se ausente de sus obligaciones y que el 16 por ciento sufra tensiones en su relación de pareja. Del sondeo se desprende que los despistes o retrasos en la toma diaria de la píldora provocan que el 44 por ciento de las usuarias tema haberse quedado embarazada, un porcentaje que se reduce al 40 en el caso de las que optan por métodos semanales y al 20 en el de los mensuales.