El candidato demócrata ha arrasado en las elecciones presidenciales estadounidenses. Y lo ha celebrado en un acto multitudinario en Chicago, la ciudad donde ha labrado su carrera política.
Los seguidores del demócrata reciben enfervorecidos al nuevo inquilino de la Casa Blanca.
Obama con la nueva primera dama de Estados Unidos, su mujer Michelle.
El candidato, con su familia sobre el estrado.
Chicago era una fiesta. Muchas esperanzas estaban depositadas en Barack Obama.
En su discurso, el candidato demócrata tuvo buenas palabras para su rival, el republicano John McCain.
Los seguidores de Obama, emocionados tras conocerse la amplia victoria de su candidato.