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Cosas de aquí | Mozos de media polaina

Desde la montaña a la tierra llana

El segundo tomo de «Indumentaria tradicional», obra de la antropóloga Concha Casado, llega mañana a manos de los lectores del Diario dentro de la gran Biblioteca Leonesa

Publicado por
E. Gancedo - león
León

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Octava entrega de la Biblioteca Leonesa de Tradiciones, mañana con el Diario de León y a los 1,80 euros de todos los sábados. Se trata del segundo libro dedicado a la Indumentaria Tradicional , obra de la veterana antropóloga Concha Casado Lobato. Si en el tomo anterior la autora abordaba los trajes autóctonos del Bierzo y de la montaña occidental, central y oriental, en esta obra los protagonistas son las indumentarias que durante muchos siglos fueron típicas de Maragatos, Valduerna, Valdería, Cepeda, Ribera del Órbigo, Tierras de León, Payuelos y el resto de zonas llanas e intermedias. Obviamente, la etnógrafa muestra los rasgos característicos, distintivos, de los trajes de todas estas comarcas, pero una de las cosas que se desprenden de la lectura del libro es la existencia de muchas cosas comunes a las indumentarias leonesas: las madreñas o galochas, que tanto se usan en la montaña como en la ribera, por supuesto. O los dengues, los manteos y los pañuelos anudados de las mujeres, que van desde el Burbia al Cea, muy típico, todo ello, del Noroeste ibérico, de ese gran arco que va desde Santander a Zamora. Otro elemento interesante, que bien podrían recuperar los grupos que investigan la cultura tradicional es la montera; picona como la asturiana, que fue muy utilizada en León si atendemos a testimonios fotográficos como el que incluye este libro, de 1878, que muestra una galana pareja de riberanos del Órbigo, él tocado con la tradicional monterina. «Las diversas modas que llegaron a nuestras villas y ciudades -escribe Casado-, con la etiqueta de la modernidad, fueron arrinconando las prendas autóctonas, sustituyéndolas por otras más modernas, acaso más prácticas, pero sin duda impersonales. Se perdió así la cultura de la vestimenta tradicional en nuestras comarcas». Aquí se recupera una gran parte de esta bella parte de nuestro patrimonio.