Cosas de aquí | Iniciativas solidarias
Motos con alas
Veinte motoristas pasearon en sus máquinas a los alumnos del colegio Sagrado Corazón, un centro en el que la Diputación invertirá este año 103.000 euros
Como motos esperaban ayer los alumnos del centro de discapacitados de Colegio Sagrado Corazón de León a que comenzara el paseo prometido por la Asociación de Moteros Solidarios, que, por cuarto año consecutivo, utilizó el ruido del motor y la velocidad para despertar las emociones de los alumnos del centro. Una veintena de motoristas se prestaron voluntarios para utilizar la «mototerapia» por sus efectos positivos en la capacidad de desarrollo sensorial de los viajeros, «es una forma de hacer partícipes a la sociedad en general de las emociones que sentimos cuando vamos montados en nuestras motos», dijo el presidente de la asociación, Ramón Carro, quien además destacó que «es una forma de integración novedosa». Al acto acudió también la presidenta de la Diputación, Isabel Carrasco, quien manifestó su admiración por la voluntad de superación de las personas con discapacidad que acuden al centro. Pero además no fue con las manos vacías. La Diputación invertirá este año 103.000 euros en la mejora de las instalaciones del centro, ubicado en las inmediaciones del polígono de La Lastra, lo que supone un incremento del 11,87% respecto al ejercicio del 2007. Sagrado Corazón es uno de los cuatro centros sociales específicos que gestiona la Diputación de León, a los que destina, según recoge el presupuesto del 2008, más de 20 millones de euros. El centro proporciona servicio de residencia para 71 discapacitados leves o ligeros, la mayoría con síndrome de Down, y emplea, actualmente, a unos 50 trabajadores. En los últimos meses se ha incrementado la plantilla del centro en 13 personas dentro de las áreas de salud y atención social. La Diputación ha asumido la gestión directa del centro desde marzo del 2007. Con anterioridad y desde el año 1963, eran las Hermanas Religiosas Hospitalarias del Sagrado Corazón quienes la ostentaban. La institución provincial mantiene un convenio con Asprona por le que le concede 60.000 euros anuales para que diariamente 50 residentes del centro trabajen en sus talleres ocupacionales. El director, Jorge Santiago, hará una petición a la Diputación para ampliar diez plazas más del centro y aprovechar las dependencias que la comunidad religiosa ha dejado libres, «nos hacen falta las plazas porque tenemos unas treinta personas en lista de espera», dijo. Los participantes en este paseo solidario disfrutaron del ruido de los motores y la sensación de libertad de un corto paseo por las proximidades del centro. Experiencia suficiente para que durante varias semanas estén hablando sobre los sentimientos experimentados, según confesó el director del centro, «cuando se aproxima la fecha de cualquier actividad que realizamos, están preguntando una semana antes, luego cuentan todo lo que han vivido». Ahora se acaba el curso, pero comienza una semana cultural en la que alumnos y padres participarán activamente en los actos programados por la organización.