Los agujeros negros son estudiados por las agencias espaciales de EE.UU. y Europa
La Nasa y la ESA destinarán más de 1.300 millones de euros y quince años de trabajo para tratar de desvelar los secretos que se ocultan tras los agujeros negros. Tratarán de comprobar las ondas que se generan en la colisión de dos estrellas, dos agujeros negros o en la explosión de una supernova.